
La cúpula del Gobierno de Mariano Rajoy, incluido el entonces presidente del Gobierno, deberá comparecer en calidad de testigo en el juicio de la 'operación Kitchen' -el operativo parapolicial que se creó para sustraer documentos al extesorero del partido Luis Bárcenas- después de que la sección cuarta de la Audiencia Nacional haya aceptado las testificales solicitadas por las acusaciones populares, entre las que reclamaron el PSOE y Podemos.
Según ha adelantado El País, el listado de nombres que acudirán a la Audiencia Nacional está compuesto prácticamente por mandos y agentes policiales y exdirigentes del Partido Popular. Entre ellos, además del expresidente del Gobierno, están la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, la exsecretaria general del PP Dolores de Cospedal -ya vinculada al caso por la Fiscalía Anticorrupción- y el exministro del Interior Juan Ignacio Zoido, así como varios exsecretarios de Estado.
No obstante, los magistrados han rechazado la solicitud de las acusaciones de tomar declaración a diversos periodistas, así como la del actual ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la del primer fiscal del 'caso Villarejo', Ignacio Stampa. Todas ellas habían sido reclamadas por la defensa del que fuera número dos de ese ministerio, el acusado Francisco Martínez.
En paralelo, los jueces también han desestimado practicar diversas pruebas solicitadas también por el acusado Martínez respecto a la certificación de los fondos reservados desembolsados, la autenticidad de las voces y conversaciones registradas por el excomisario o las grabaciones al círculo familiar de Bárcenas. En este punto, el tribunal justifica que las mismas debían de haberse practicado con anterioridad en la fase de instrucción porque, de lo contrario, el órgano jurídico estaría "excediendo sus competencias":
La celebración de la vista oral está a la espera de que el tribunal encuentre un hueco, ya que, según el último auto de los propios magistrados, hay una "saturación de plenarios". No obstante, aclaran su intención de avanzar con los trabajos de cara a la preparación del juicio.