Especial X Aniversario Felipe VI
Don Felipe, que llegó al Trono a los 46 años, representa la regeneración. Recogió el legado de su padre, que dejó la institución con una crisis de imagen dañada por el caso Corinna Larsen, por el episodio del safari en Botswana de 2012 y por el caso Nóos, que llevó a Iñaki Urdangarin a prisión en junio de 2018.
Anunció su hoja de ruta en el primer discurso de Navidad como monarca. Defendió la necesidad de abrir una "profunda regeneración" de la vida colectiva y "cortar de raíz y sin contemplaciones la corrupción". 2014 es su despegue internacional. Fue clave su visita a Estados Unidos, con Barack Obama de presidente, cuando habló en la Asamblea General de Naciones Unidas en lo que se interpretó como su presentación al mundo. También, cuando el jefe del Estado debutó en el Parlamento Europeo, en 2015, y pronunció aquello de "Soy europeo porque soy español". En diciembre de 2015 se celebran las elecciones generales, las 12º desde la Transición y las primeras para Felipe VI. Fueron convocadas por Rajoy. En su discurso de Navidad, el monarca pidió a las fuerzas políticas actuar con sentido del deber: "España inicia una nueva legislatura que requiere todos los esfuerzos de nuestras instituciones democráticas".
En 2017 llegaba la sentencia histórica que condenaba a Iñaki Urdangarin a cinco años y diez meses de prisión por corrupción en el caso Nóos, que se ejecutó el 18 de junio del año siguiente. La infanta Cristina quedó absuelta. En plena campaña del Brexit, en julio, los Reyes visitaron Reino Unido 31 años después de que lo hicieran los eméritos. Don Felipe intervino en la Cámara de los Lores y los Comunes, en Westminster, donde mencionó el acuerdo de salida de la UE para que dé "confianza y certidumbre" a los ciudadanos británicos y españoles.
Su momento más difícil llegó el 3 de octubre de ese año al defender la unidad de España ante el procés catalán. Dos días antes, Cataluña había celebrado el referéndum independentista. Don Felipe llamó a "asegurar el orden constitucional". También despejó su agenda para atender la grave crisis que abrió el camino hacia la declaración de la independencia en Cataluña y el inmediato suspenso posterior.
Fue su discurso más complejo de los 742 que ha pronunciado en su reinado (desde el inicio hasta el pasado 29 de mayo). "España es hoy una democracia madura" donde cualquier ciudadano puede "pensar, defender y contrastar" sus opiniones y sus ideas, pero "no imponer las ideas propias frente a los derechos de los demás", dijo en la Navidad de 2017.
