
El exempleado de Boeing, Joshua Dean, de 45 años, que fue otro de los denunciantes de los "errores de producción de la compañía" falleció este martes tras contraer una neumonía rápida propagación, según reportan medios estadounidenses.
Dean fue un empleado de la compañía fabricante de aviones durante varios años. En 2023 fue despedido tras alertar sobre los problemas de los 737 Max, lo que ha generado un revuelo y una crisis de Boeing.
Su reciente muerte se suma a la de John Barnett, un exgerente de calidad de la empresa, o el también llamado "soplón", que denunció los "fallos de producción" de los aviones mucho antes de la explosión del tapón de la puerta del vuelo 1282 de Alaska Airlines, en 2017.
Dean informó haber tenido problemas para respirar hace poco más de dos semanas y fue trasladado al hospital donde desarrolló neumonía y una infección resistente a los antibióticos llamada MRSA, lo que le provocó la muerte, informó Seattle Times.
El ingeniero mecánico y ex auditor de calidad del proveedor de Boeing Spirit AeroSystems, que fabrica el fuselaje del asediado 737 Max, "gozaba de buena salud y era conocido por llevar un estilo de vida saludable" antes de su enfermedad, contaron sus familiares a Times y recoge Fortune.
Primeros denunciantes
Según detalla el medio económico, Dean fue uno de los primeros denunciantes en hacer sonar la alarma sobre problemas de calidad en el proveedor clave de Boeing.
"En una demanda de diciembre contra Spirit AeroSystems, que alega que la dirección de la compañía hizo afirmaciones falsas o engañosas cuando dijeron que se dedicaban a la seguridad y a la fabricación sin defectos, Dean describió cómo informó de un problema con el mamparo de presión de popa del Boeing 737. una pieza crítica de la infraestructura del avión, a varios gerentes en diferentes departamentos, pero fue ignorada. Más tarde, surgió la noticia de que los empleados de Spirit perforaron mal agujeros en partes de algunos aviones 737 Max, incluido el mamparo de presión de popa sobre el que Dean había advertido", cuenta la publicación.
En esta línea, Dean también presentó una denuncia ante la Administración Federal de Aviación alegando "mala conducta grave y flagrante" por parte del equipo de gestión de calidad que trabajó en la línea de producción del 737 Max. Después de su despido en abril de 2023, Dean también presentó una queja ante el Departamento de Trabajo, alegando que fue despedido por expresar preocupaciones sobre la seguridad de los aviones de Boeing.
La celebración de la pizza
En una entrevista a WSJ en el mes de enero, Dean señaló que los aviones salían de la fábrica de Wichita, donde había trabajado con defectos no detectados, debido a una cultura en la que los trabajadores eran constantemente apurados para cumplir con plazos poco realistas, y donde se desaconsejaba encontrar fallas o era algo peor.
"En Spirit se sabe que, si haces demasiado ruido y causas demasiados problemas, te conmoverás. No quieren que encuentres todo y lo escribas", señaló al medio.
El auditor de calidad incluso describió cómo Spirit organizó una fiesta de pizza para los empleados para celebrar la disminución del número de defectos en las piezas de sus aviones, pero muchos sabían que las cifras habían disminuido sólo porque la gente tenía miedo de informar problemas, señala Fortune.
Dean es el segundo denunciante de Boeing que muere repentinamente este año, después de John Barnett, de 62 años, quien supuestamente murió por una "herida de bala autoinfligida" en marzo.