
Vicente Sánchez Rivero lleva desaparecido desde el pasado 27 de enero y nada se sabe sobre su paradero. Este vecino de Hinojal (Cáceres) salió de casa sin echar la llave, practicamente con lo puesto y sin su teléfono móvil encima. Hace ocho años le había tocado la lotería y todo el mundo lo sabía.
Tente, como así es conocido en el pueblo cacereño de apenas 400 habitantes, tiene 79 años, pelo moreno y 1,65 metros de altura. Es un hombre de rutinas con una vida ordenada, por eso a su familia le extraña que saliera de casa hace un mes sin el móvil y con la cama sin hacer, como si tuviera prisa.
En su domicilio no se encontró nada extraño ni ninguna pista que pudiera indicar dónde pudo ir Vicente o si había quedado con alguien. Era por todos conocido que al hombre le había tocado un millón de euros en la lotería, y la Policía no descarta que sea el motivo de su desaparición, aunque mantienen abiertas todas las hipótesis.
Una de sus hermanas, Elvira, comentó a los medios de comunicación que el premio le tocó hace ocho años y que "hasta ahora no se han metido con él". Asimismo, ella reconoció que se enteró por una tercera persona, que su hermano nunca le contó que había ganado tal cantidad de dinero, por lo que no era algo de lo que alardeara.
Lo que sí detalló Elvira es que tanto a ella como a su otra hermana les pidió documentación para realizar su testamento, pero se desconoce si llegó a hacerlo. Elvira tenía claro que a Vicente alguien lo sacó de casa. "No se ha ido por su propia voluntad porque es una persona con mucho miedo de todo y no le abre la puerta a cualquiera y siempre tiene la llave echada", señaló la hermana, quien detalló que la última vez que habló con él fue a principios de enero, cuando le aseguró que se encontraba bien.
Otra vecina del pueblo también reconoció que Vicente le había comentado que tenía que ir a Cáceres a cobrar el dinero de la pensión a final de mes. Algo que el hombre siempre tenía por costumbre. Para eso siempre cogía un autobús los lunes y los viernes, pero en esta ocasión no lo hizo.
Continúa la búsqueda
Tanto la Guardia Civil como la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) llevan semanas peinando la propia localidad así como las zonas limítrofes en busca de alguna pista sobre su paradero pero por el momento no han conseguido avances.
El cuerpo ha desplegado un dispositivo formado por agentes, drones, un perro especializado y el equipo de actividades subacuáticas, que ya han peinado los ríos próximos al municipio, como son el Almonte y Tajo, pero sin conseguir resultado.