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Los apellidos españoles a juicio: ¿origen judío o árabe?

  • Ambas culturas son parte de la historia de la península ibérica
  • Su legado ha dejado en España sobrenombres como Albarracín o Carvajal

Durante el reinado de Carlos, I Toledo se convirtió en la sede principal de la corte y pasó a denominarse Ciudad Imperial, justo unos años antes de que Madrid fuera designada como capital del imperio español. Además de Ciudad Imperial, Toledo era conocida popularmente como ciudad de las tres culturas, por albergar entre sus murallas a cristianos, musulmanes y judíos, en un modelo de convivencia social que ha perdurado hasta hoy.

No en vano, los musulmanes se instauraron en la península durante 8 siglos (desde el 711 d.c), en un proceso en el que los territorios ibéricos pasaron a denominarse Al-Ándalus y que finalizó el 2 de enero de 1492 con la entrega del Reino de Granada a los Reyes Católicos.

Así, el legado musulmán dejó en España una herencia rica en ciencias, medicina, química, arquitectura y, la más notable, la semántica. Numerosas palabras en castellano provienen del árabe, las más evidentes todas aquellas que comienzan con –al: 'almohada', 'albañil', 'alcohol', 'alcalde', 'alcazaba'... Aunque también son de origen árabe taza, jarabe, comino, jarra, estrella o tabaco, entre otras.

García, Almeida, Castillo...

Por ende, el patrimonio musulmán también recoge los abundantes apellidos de origen árabe que perduran a día de hoy, que, al igual que las palabras ya mencionadas, también comienzan por –al: Albarracín, Alcántara, Alcalá, Almansa o Almeida. No obstante, esa herencia también ha dejado en la península ibérica otros nombres comunes como son Barahona, Pascual, Palacios, Venegas, Molina, Morales, Gálvez.

Aunque es cierto que, algunos de estos, no tienen claro su origen árabe o castellano, ya que era bastante común formar el apellido en base al nombre del padre, por ejemplo: Fernández (hijo de Fernando), Rodríguez (hijo de Rodrigo) o Martínez (hijo de Martín). La gran mayoría de los sobrenombres terminados en '-ez' provienen de raíces latinas y castellanas, aunque algunos casos como el mencionado Martínez puede tener influencia musulmana.

La lista de apellidos de origen árabe podría ser interminable, pero la plataforma genealógica online, MyHeritagem, ha elaborado una lista de los más comunes en España.

Nombres de origen musulmán:

A: Abengoa, Aguilar, Álamo, Albarracín, Alcalá, Alcántara, Alcázar, Alicante, Almansa, Almeida.

B: Barahona, Barroso, Benarroch, Benavides, Benegas, Benjumea, Bermejo, Bono, Buendía.

C: Cabrero, Castillo, Cebrián, Cid, Cordobés, Cortés.

E: Elías.

G: García, Gálvez, Granadino, Guerra.

H: Herrera.

J: Jaén, José.

L: Laibe, Lama, Lara, Lucas.

M: Manzur, Maraver, Martínez, Méndez, Mendoza, Molina, Morales, Morón, Muley.

N: Nevot, Nebot, Nicolás.

P: Palacios, Palomeque, Pascual, Pérez, Pinto, Ponce.

S: Salama, Salomón, Salvador, Samur, Saporia, Seda, Sordo, Solís.

T: Torres.

V: Valenciano, Venegas.

Barrios, Campos, Padilla...

Hace más de 20 años, el Gobierno de España publicaba la primera lista oficial de apellidos de origen judío o sefardí, con el reconocimiento posterior a esta comunidad. Al igual que los musulmanes, los judíos fueron parte importante de la historia de la península ibérica, hasta su expulsión a manos de los Reyes Católicos en 1492.

Una importante comunidad asentada tanto en el Reino de Castilla como en el Reino de Aragón, y cuyo legado se traduce sobre todo en ámbito culinario español y en el legado arquitectónico. Así, la cultura popular de la cocina nacional de mantener ciertos alimentos en escabeche proviene de los judíos, quienes conservaban la comida en vinagre durante los días del shabbat.

Por su parte, la lista que hizo pública el Gobierno allá por diciembre de 2022 incluía los siguientes apellidos:

Nombre de origen judío:

A: Acevedo, Acosta, Aguado, Alarcón, Alba, Alegre, Alfonso, Alfaro, Alonso, Álvarez, Amigo, Amaya, Aranda.

B: Baltasar, Benavente, Benítez, Bravo.

C: Calvo, Camacho, Carrasco, Carrillo, Carvajal, Castellanos.

D: Delgado, Diego, Díez, Díaz, Domínguez, Durán.

E: Enrique, Enríquez, Esperanza, Espinosa.

F: Fajardo, Fernández, Ferrer, Ferrero, Flores, Fuentes.

G: Garzón, Gil, Gimeno, Giménez, Gómez, González, Gutiérrez.

H: Hernández, Heredia, Holgado, Huerta, Hurtado.

I: Izquierdo.

J: Jiménez, Jimeno, Juárez.

L: Lázaro, Leal, Larios, Leiva, León, López, Lorca.

M: Madrid, Machado, Manuel, Márquez, Marchena.

O: Ochoa, Olivos, Olmos, Ordóñez, Ortega, Ortiz.

P: Pacheco, Palma, Palomino, Paredes, Pedraza.

Q: Quirós, Quemada.

R: Ramírez, Ramos, Real, Rey, Reina, Ribera, Robles, Rodríguez, Ruiz.

S: Salgado, Salinas, Salas, Salvador, Sánchez, Serrano, Silva.

V: Valero, Valle, Varela, Vargas, Vázquez, Villanueva, Vidal.

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