
Tubos Reunidos ha cerrado el ejercicio 2022 con un beneficio neto de 43,5 millones, frente a pérdidas de 64,7 millones en 2021. Los ingresos consolidados fueron de 524 millones de euros y una cifra de negocios de 514 millones, duplicando el importe de 2021 y obteniendo los mejores resultados de los últimos años. Esta sustancial mejora se basa en una notable
Para Francisco Irazusta, presidente de Tubos Reunidos: "Este resultado neto positivo de 43,5 millones de euros es un hito muy importante que nos permite afrontar las inversiones previstas en el plan estratégico, así como todos los compromisos con los acreedores".
El directivo ha explicado que el ejercicio 2022 se ha caracterizado por la volatilidad y variabilidad de demandas y costes, y "considero que 2023 seguirá la misma línea, con un dato diferencial: 2023 lo iniciamos con una cartera de pedidos de 303 millones de euros, un 71% superior a la del inicio del año pasado, que nos permite ser moderadamente optimistas".
El EBITDA del Grupo ha ascendido a 64 millones de euros, incrementando en 115 millones el obtenido en 2021. El Grupo ha generado un flujo de caja neto de 18 millones de euros cerrando el ejercicio con 95 millones de euros en caja y reduciendo su deuda neta.
Cartera de 303 millones
Con los datos de 2022, Tubos Reunidos cuenta actualmente con una cartera de pedidos por valor de 303 millones de euros, un 71% superior a la del inicio del año pasado, lo que marca un nivel récord, máxime con un mix de aceros al carbono o bajos aleados muy concentrado en los segmentos de OCTG y mecánico.