
Kevin Chou sirvió como fusilero en los marines de la República de Corea, momentos en los que no dudaba de su buena salud, ya que podía superar los duros entrenamientos físicos que eran parte de su servicio al país. "Tengo miopía bastante severa, pero entonces seguía pensando que estaba sano", comentaba.
Sin embargo, en 2016 le diagnosticaron glaucoma con tan solo 26 años, una enfermedad ocular crónica causada por daño en el nervio óptico, y que es más común en adultos de edad avanzada.
Los problemas de la enfermedad
Choi comenta que en aquel momento ya había perdido la mitad de la visión en su ojo derecho, mientras que en el izquierdo le quedaba entre un 60% y un 70%. Además, admite que aquello podría haberse evitado si se le hubiera detectado el problema con anterioridad. A pesar de todo, en el mismo año fundó su propia startup de atención sanitaria, Mediwhale.
Choi y su oftalmólogo, Tyler Hyungtaek Rim, lanzaron su proyecto con un capital de 5.000 dólares. Seis años después, desde la misma aseguran que varios inversores les han obsequiado con varios millones de dólares, así como que sus dispositivos ya han sido aprobados por la Unión Europea y por varios países asiáticos. La enfermedad le impulsó a apostar por el negocio.
La necesidad de una alternativa
Choi es CEO de Mediwhale, y asegura que el diagnóstico de la enfermedad "no es una coincidencia". Y es que el mismo, graduado en ingeniería industrial, empezó a cavilar sobre posibles soluciones en Inteligencia Artificial (IA) que promoviesen la detección temprana de enfermedades. "Tiene que haber una razón por la que esto me ha pasado a mi, y es que creo que yo mismo podría solucionarlo, porque soy ingeniero", aseguraba.
Por su parte, Rim entendía las necesidades clínicas no cubiertas cuando se trata de detectar enfermedades cardiovasculares, algo que suele llevarse a cabo mediante escáneres de Tomografía Computarizada o TC. "Esta requiere un montón de recursos y de tiempo, por lo que es una carga tanto para los proveedores de salud como para los pacientes", afirma.
La propia experiencia de Choi con "largas jornadas de pacientes" (período que transcurre entre la persona poniéndose en la cola del hospital y recibiendo resultados de sus pruebas) le animó a buscar alternativas más rápidas. Afirma que esto es una traba, y que él mismo se siente ansioso cuando acude al hospital para las revisiones de su enfermedad. "Es una prueba larga, en la que tengo que esperar de 2 a 3 horas para obtener los resultados", comenta.
Lo que ofrece Mediwhale
Por su parte, desde la startup de Choi aseguran que pueden detectar el riesgo cardiovascular con "la misma precisión" que un escáner TC, simplemente mediante una fotografía retiniana por ojo. Esto permitiría ofrecer informes al paciente "en un minuto".
"Solo lleva de unos segundos y no requiere ninguna dilación. La imagen se sube de forma simultánea al sistema en la nube, y su IA lo analiza de forma automática", añadía Rim.
El mayor desafío para la startup
El mayor desafío para los fundadores de Mediwhale era convencer a otros médicos de que los ojos pueden ser "la ventana del cuerpo entero, pues son los únicos órganos del cuerpo que permiten ver vasos sanguíneos sin recurrir a ninguna medida invasiva", explicaba Rim.
"Los cambios en la estructura microvascular de la retina... se han identificado como predictores fiables de enfermedades relacionadas con los vasos sanguíneos, como las cardiovasculares y renales, pues los cambios suelen tener lugar antes de que puedas notar ciertos síntomas importantes", prosigue el médico.
Para Choi sus investigaciones sobre la validez de las fotografías retinianas, que fueron publicadas en periódicos valoradas por sus colegas de profesión, le dieron a Mediwhale el 'chute' de credibilidad que necesitaba. Y entre los países que ya aprobaron el uso de su tecnología se encuentran Reino Unido, Corea, Singapur y miembros de la UE. Aseguran además haber reunido en torno a 5 millones de dólares en financiación, con firmas japonesas y coreanas entre sus principales apoyos.
Tener un propósito para superar los desafíos
Choi asevera que encontrar "tu propia razón" es fundamental para superar los desafíos, tanto en la vida como en los negocios. Añade que el saber que su enfermedad podría haber sido detectada anteriormente le mantiene motivado en su misión, que es prevenir que otras personas descubran sus problemas cuando ya es demasiado tarde.
"Quizás para alguien que también confíe en su buena salud, un simple escáner ocular podría cambiar su vida", comenta. Además, Choi cuenta que el progreso y el éxito que le acompañan no impiden que para él sea una experiencia "que enseña humildad". Asegura que cada conversación que mantiene con un médico es una lección aprendida, pues el sector es muy conservador. "Para mi, esa el la cualidad más clave que debe tener un emprendedor", dice.