
Pickme es una startup francesa con la que un cliente puede hacer un pedido, y tener la posibilidad de que su vecino lo reciba si así lo cree conveniente. Esta práctica, quizás normal para aquellas personas que tienen buena relaciones con otros residentes de un mismo edificio, es sin embargo generalizable gracias a Pickme.
La compañía ha reunido recientemente 3,5 millones de euros con una ronda de financiación, que le servirá para desarrollar su red de puntos de recogida y de entrega, de la que posteriormente podrán servirse tanto las empresas de logística como aquellos minoristas de comercio electrónico.
Entre sus inversores destacan Founders Future, FrenchFounders, Kima Ventures y diversos 'business angels'.
Una oportunidad bien aprovechada
Para aquellas personas que suelen pasar el día fuera, que suelen tener problemas a la hora de recibir entregas por sus horarios, los puntos de recogida son una función de gran utilidad. Sin embargo, esto requiere desplazarse hasta estos lugares concretos para obtener su paquete, en vez de obtenerlo directamente desde la puerta de su hogar.
Los puntos de recogida suelen ser comercios de diversa índole, que se convierten en pequeños centros logísticos para obtener unos ingresos extra. Un ejemplo común de empresas de puntos de recogida en Francia, pero también en España, es Mondial Relay. Otras importantes en el país galo son también Relais Colis o La Poste.
La popularidad de estos negocios se debe a varios factores, destacando el aumento de los pedidos online, o el éxito de plataformas de internet como Vinted, eBay o Leboncoin.
¿Qué ofrece Pickme?
Es común que los puntos de recogida sean también lugares de entrega, donde los empleados en este sector dejan un paquete, para tomar otro y llevarlo a otro lugar. Además, cabe añadir que estos puntos de recogida ayudan a disminuir las emisiones de CO2, al aumentar la eficiencia de los trayectos y por tanto disminuir los tiempo de entrega.
Pero Pickme está dispuesta a ofrecer otro camino: en vez de escoger entre una entrega a domicilio o una recogida en cierto local, sus clientes pueden pedir que un vecino reciba el paquete por ellos. Hasta ahora la empresa tiene casi 100.000 cuentas creadas, y se ha asociado con DHL, GLS, Geodis y Colissimo. Y los individuos pueden definir un número máximo de paquetes para guardar según el tamaño de su casa.
Cuando llega el momento de recoger el pedido en casa del vecino, este recibe una pequeña cantidad, que no alcanza un euro. En urbes densamente pobladas existen numerosos comercios que actúan como puntos de recogida, por lo que la utilidad de Pickme es mayor en zonas rurales, donde existen menos posibilidades de dejar los paquetes. Esto se hace notar en los clientes de la startup, de los que el 30% habita áreas no urbanas.