
El Gobierno vasco ha rebajado las previsiones de crecimiento económico de Euskadi para 2022 y 2023, debido a la fuerte inflación y a la prolongación de la guerra en Ucrania, pero descarta la recesión. Así, prevé un crecimiento del 4,3% en 2022, frente al 4,5% anterior, y del 2,1% en 2023, frente al 4,1% inicial.
El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha informado de esta revisión de previsiones del crecimiento de la economía vasca, junto al viceconsejero de Economía y Fondos Europeos, Iñaki Barredo, y el director de Economía y Planificación, Alberto Ansuategi, como paso previo a la elaboración de los presupuestos de la comunidad autónoma para el próximo ejercicio.
Presión alcista adicional
Azpiazu ha señalado que durante el segundo trimestre de este año "varios 'shocks' han sacudido una economía mundial ya debilitada por la pandemia", con una inflación superior a lo previsto y por la invasión rusa a Ucrania, que "está lastrando el crecimiento y ejerciendo una presión alcista adicional sobre los precios, sobre todo en el caso de los alimentos y la energía, que está afectando a la confianza de las empresas y los consumidores".
Por estos motivos, el departamento de Economía y Hacienda ha realizado una revisión de las previsiones de crecimiento de la economía vasca, estimando un crecimiento del 4,3% para 2022 (previo 4,5%) y del 2,1% en 2023 (previo 4,1%) -la estimación del crecimiento potencial de la economía vasca antes de la pandemia era del 1,8%-.
"Las nuevas previsiones están condicionadas a la evolución favorable prevista de la inflación durante los próximos meses, dado que si la inflación tuviese un comportamiento peor al considerado en este escenario, la consecuencia sería un menor crecimiento para el año próximo", ha advertido.
En materia de empleo, ha informado de que el escenario actual anticipa una "significativa reducción" de la tasa de paro, que llegará al 8,8% de media este año y que bajará al 8,3% el próximo, lo cual se traduce en una creación de unos 26.000 puestos de trabajo este año y de unos 12.000 empleos el próximo.
Desaceleración
Preguntado sobre la entrada en recesión, Pedro Azpiazu ha afirmado que "yo no veo recesión en este momento y con los datos actuales", sí una desaceleración. "El fuerte impulso de la economía vasca en el segundo trimestre no esconde que se está produciendo una desaceleración en el ritmo de crecimiento, que se extiende a todos los sectores principales", ha señalado.
Respecto a la "catarata de propuestas de nuevas figuras impositivas" anunciadas en los últimos días por diferentes administraciones, Azpiazu ha destacado que el Gobierno vasco y las Diputaciones Forales las han conocido por los medios de comunicación. "Quiero mostrar mi malestar, y demandar una forma más seria de colaboración entre administraciones. Euskadi cuenta con un régimen de financiación que es el Concierto Económico Vasco, régimen basado en acuerdos bilaterales. Espero que la esencia de la bilateralidad se imponga", ha reclamado.