
Una sola carta de la primera edición de coleccionables Pokémon puede llegar a venderse hasta por un millón de dólares. Inversores y tecnológicas han seguido de cerca este reciente mercado y han decido unirse a la fiebre Pikachu, invirtiendo cientos de millones de dólares.
Los confinamientos derivados de la crisis sanitaria han provocado que muchas personas rebusquen en sus cajones con la esperanza de encontrar alguna forma de entretenimiento. Algunos encontraron juegos de mesa, otros se dieron de bruces con su antigua videoconsola y unos pocos hallaron su viejo mazo de cartas Pokémon.
Esto ocurre después de que, en 2006, se produjese el lanzamiento de Pokémon Go, que provocó que una oleada de veinteañeros, nostálgicos de su niñez, se lanzase a la calle a atrapar a sus Pocket Monsters favoritos gracias a la realidad aumentada. Muchas de estas personas, los que tuvieron la suerte de haberla conservado, desempolvaron su vieja Game Boy para recordar esas horas de diversión en blanco y negro, y en 16 bits.
Desde entonces, esta tendencia no ha hecho más que aumentar y, después de su creación en 1996, la franquicia está más vigente que nunca. Muchos pokemaníacos se han dado cuenta de esto y han aprovechado el tirón para poner en oferta sus antiguas cartas coleccionables. Según Bloomberg, algunos de estos cromos se pueden vender por más de 4.500 dólares.
Las ventas de cartas Pokémon crecen un 1.046% en 2021
En 2020, las ventas generales de tarjetas coleccionables vivieron el mayor aumento de su historia, un 142% en eBay; donde Pokémon lideró el mercado, con un promedio de cinco tarjetas por minuto, superando hasta a los cromos deportivos. No obstante, este año el impulso ha sido todavía mayor. Las ventas de cartas de la franquicia en eBay aumentaron un 1.046% en el primer trimestre.
Gracias a este creciente mercado, empresas de autentificación han aumentado su valor. Certified Collectibles Group, por ejemplo, vendió recientemente una participación mayoritaria a Blackstone Group por valor de 500 millones de dólares.
El socio general de Night Ventures, Ben Mathews, cree que la industria de los coleccionables está en su mejor momento. Por esto motivo, su empresa matriz Night Media está buscando invertir en nuevas empresas que aprovechen la fiebre Pokémon.
Del mismo modo, grandes inversores se han lanzado a acuerdos relacionados con la franquicia. A principios de esta semana, la startup Collectbase planteó una ronda de financiación dirigida por el multimillonario Peter Thiel. Esta compañía fabrica un software que permite a los coleccionistas escanear, fijar el precio, organizar y rastrear el valor de su colección de cartas -similar a una cartera de acciones-, y luego vender en eBay. La aplicación móvil de la compañía, Cardbase, comenzó dedicándose a los cromos deportivos y se expandió a Pokémon esta primavera, después de meses de solicitudes cada vez más intensas, dijo Anas Salem, uno de los dos fundadores, a Bloomberg.
En Estados Unidos, la firma de subastas en vivo Whatnot ha recaudado un total de 75,4 millones de dólares, y en mayo ya valía más de 500 millones de dólares, según datos de la firma de investigación PitchBook. La compañía aumentó por diez sus ventas durante el año pasado gracias a la inclusión de Pokémon.
Los inversores temen que las cartas se devalúen por exceso de oferta
De momento, el número de cartas autentificadas es relativamente bajo, lo que deriva en que algunas cartas se vendan hasta por un millón de dólares. Sin embargo, los inversores temen que, debido a la gran popularidad que está tomando la franquicia, pequeños coleccionistas se lancen a vender sus mazos y devalúen su precio.
Del mismo modo, la baja oferta se debe a que las empresas de autentificación se han visto superadas por el exceso de demandas de evaluación de particulares. No obstante, se teme que, una vez analizadas, la oferta se multiplique por seis; lo que reduciría su valor drásticamente.