
El Grupo Tragsa está constituido por dos sociedades de capital íntegramente público: la Empresa de Transformación Agraria (Tragsa), matriz fundada en 1977 para la ejecución de obras y servicios de desarrollo rural, conservación medioambiental y actuaciones de emergencia y por su empresa filial Tecnologías y Servicios Agrarios (Tragsatec), creada en 1990 para la realización de proyectos de consultoría e ingeniería.
Tragsa y Tragsatec están tuteladas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y están acreditadas por parte de la Intervención General de la Administración como medio propio personificado y servicio técnico de las administraciones públicas.
El accionariado del Grupo Tragsa está constituido por 41 administraciones y entidades entre las que destacan como accionistas mayoritarios la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) y la Dirección General del Patrimonio del Estado. Forman también parte de su accionariado las 17 Comunidades Autónomas, las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla, los siete Cabildos Insulares de Canarias, dos Consejos Insulares de Islas Baleares, nueve Diputaciones Provinciales y una Diputación Foral, a día de hoy.
Su implantación territorial, con delegaciones y presencia en todas las provincias, le confiere gran capacidad de actuación e inmediatez
El Grupo desarrolla su actividad, desde hace más de cuatro décadas, siempre de la mano de las administraciones y del servicio público, garantizando la máxima profesionalidad y el más alto nivel de calidad en sus actuaciones. Su implantación territorial, con delegaciones y presencia en todas las provincias, le confiere gran capacidad de actuación e inmediatez en la respuesta ante cualquier requerimiento urgente de la Administración Central, autonómica y local.
Contribuyen a la actividad del Grupo sus cinco parques de maquinaria (con más de 1.700 unidades entre vehículos y máquinas, y más de 7.200 elementos de maquinaria auxiliar), una planta de prefabricados y un vivero propio. Entre las apuestas del Grupo destaca la innovación, con 27 proyectos en la cartera de I+D+i, que han supuesto una inversión de 3 millones de euros solo en el año 2018.
En relación a las personas que contribuyen con su esfuerzo y dedicación a la acción de servicio público del Grupo Tragsa, el incremento de la actividad productiva durante 2018 ha llevado a alcanzar los 12.684 empleos, el valor más alto desde el año 2011, de los que aproximadamente el 75% desempeñaron su trabajo en actividades no centralizadas caracterizadas por su cercanía al territorio, contribuyendo por tanto a fijar la población en el medio rural.
Edificación en el medio rural
El Grupo Tragsa cuenta con una división de edificación y arquitectura especializada en la adecuación de espacios, que supone el 12,7% de la producción en 2018. La aproximación de Tragsa a este sector es integral, con capacidad de gestión de proyectos de edificación y arquitectura, que abarcan desde la realización de estudios arquitectónicos y de ingeniería, a la rehabilitación y construcción de edificaciones o la adecuación energética.
Para todo ello cuenta con un equipo multidisciplinar de profesionales, altamente cualificados, que garantizan la calidad de estos proyectos y aseguran que estos cumplan con las máximas exigencias en materia de sostenibilidad y eficiencia energética. En estos trabajos, la compañía integra los últimos avances tecnológicos para conseguir la mayor eficacia y calidad de los trabajos que se le encargan, cuidando siempre de establecer un respetuoso diálogo con el entorno natural o urbano donde desarrolla cada actuación.
En todo caso, la actividad del Grupo está siempre alineada con la sostenibilidad, tomando como propias las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.El compromiso del Grupo Tragsa con la Agenda 2030, materializado en su figura de socio signatario del Pacto Mundial, está patente en todos los trabajos que lleva a cabo en materia de recuperación patrimonial.
La sostenibilidad del medio rural descansa, en buena medida, en la existencia de las infraestructuras necesarias para garantizar la fijación de la población, un reto que el Grupo Tragsa ha asumido como propio.