
La Guardia Civil se ha personado este martes en la sede central del 112 en Reus (Tarragona) para llevar a cabo un registro y el requerimiento de grabaciones de llamadas realizadas el día del referéndum del 1 de octubre que ha durado hasta las 11:30 de la mañana.
Este registro se sitúa dentro del marco de investigación de la celebración del 1-O, aún bajo secreto de sumario, después de que el juez de Gandesa haya reclamado a los Mossos d'Esquadra que conserve las conversaciones telefónicas mantenidas entre los mandos durante el operativo para investigar concretamente si hubo inacción de la policía catalana.
El interés lo centran las comunicaciones realizadas por los Mossos d'Esquadra para comprobar si hubo órdenes contrarias (inacción) al mandato del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), motivo por el que el mayor del cuerpo, Josep Lluís Trapero, declaró este lunes en la Audiencia Nacional y le fue retirado el pasaporte como medida cautelar.
Concretamente, el magistrado ha requerido a la autoridad competente de los Mossos que conserve las conversaciones de interés en el dispositivo de almacenamiento, que deberá ser puesto a disposición de la autoridad judicial a través de la diligencia que se ha practicado este martes.
En esa sede, dependiente de la consellería de Interior de la Generalitat, hay ficheros de todos los servicios de emergencias del gobierno catalán: Mossos d'Esquadra, Bomberos, Protección Civil, Sistema de Emergencias Médicas y 112.