
Los accionistas del Banco Portugués de Inversiones (BPI) rechazaron hoy eliminar el límite a los derechos de voto como pedía CaixaBank, que consideraba esta alteración estatutaria una condición indispensable para continuar con su OPA.
En un comunicado enviado al regulador bursátil, la entidad financiera lusa -la cuarta más importante del país por activos- informó de que el cambio de estatutos recibió el apoyo del 52,45% de los votos emitidos en la asamblea general celebrada hoy, cuando necesitaba del 75% para hacerse efectiva.
CaixaBank, que controla el 44,1% del capital, vio así caer la que era su principal exigencia para continuar con su oferta, a la que se oponía el segundo mayor accionista del BPI, la multimillonaria angoleña Isabel dos Santos, con el 18% de los títulos.
La firma española colocó como requisito indispensable en su OPA -presentada a mediados de febrero- la supresión del blindaje de los derechos de voto, limitados al 20%, lo que en la práctica hace que su poder en el banco portugués sea muy similar al de la angoleña Dos Santos pese a que su participación es más del doble.
La votación sobre esta alteración estatutaria fue incluida a petición de los angoleños ya en el orden del día de la asamblea general de accionistas del pasado 29 de abril, pero finalmente fue aprobado aplazar la votación.
Entonces fue el presidente del Consejo de Administración del BPI, Artur Santos Silva, quien elevó una moción para posponer la decisión -como pretendía CaixaBank- con el argumento de que los accionistas debían pronunciarse sólo después del registro oficial de la OPA, cuando pudieran analizar toda la información sobre la oferta.
Sin embargo, según medios lusos, la OPA no recibió todavía el visto bueno de todos los organismos supervisores implicados en la operación por lo que no pudo ser registrada.
BPI anima a CaixaBank a que siga con la oferta
Con todo, el presidente del Consejo de Administración del BPI, Artur Santos Silva, aseguró que, pese al rechazo de los accionistas al cambio de estatutos, CaixaBank podría proseguir con su OPA.
La decisión de no eliminar el límite a los derechos de voto "puede no significar el fin de la OPA, hay condiciones que el oferente puede decidir alterar", afirmó Santos Silva.
El responsable de la entidad financiera lusa informó de que los representantes de CaixaBank se comprometieron a "tomar una posición lo más rápido posible sobre la continuidad de su oferta fuese cual fuese el resultado" de la votación.