
La Comisión Europea cree que España cerrará este año con un déficit de las administraciones públicas equivalente al 2,6% del PIB, un porcentaje que es cuatro décimas superior al objetivo pactado -del 2,2%-, a pesar de no haber tenido en cuenta en la estimación la subida de las pensiones pactada entre el Gobierno y el PNV de la semana pasada.
El Ejecutivo comunitario ha presentado este jueves sus previsiones de primavera, en las que ha actualizado sus proyecciones macroeconómicas para todos los países de la eurozona. En ellas también eleva tres décimas su previsión de crecimiento de la economía española, hasta el 2,9%.
Bruselas considera que el ritmo de reducción del déficit se ralentizará aún más, por el acuerdo con Ciudadanos para los Presupuestos de 2018, que incluyen reducciones de impuestos para los salarios más bajos, la subida de las pensiones mínimas y de viudedad y el aumento de sueldo del 1,75% para los funcionarios.
Además, el documento de Bruselas también tiene en cuenta un "incremento temporal" de la inversión pública por el rescate de las autopistas quebradas.
Sin embargo, no ha estimado en las previsiones el pacto alcanzado entre el Gobierno y PNV para subir todas las pensiones un 1,6% este año, firmado el 25 de abril, dos días después de la fecha de corte fijada por la CE para su informe. El coste adicional de esta medida es de1.522 millones, según apunta el Gobierno en el Programa de Estabilidad remitido a Bruselas.
Para 2019, el Ejecutivo comunitario cree que el déficit encogerá hasta el 1,9% del PIB gracias al ciclo económico. Los riesgos fiscales, señala el texto, están relacionados con la "incertidumbre de la fortaleza de los ingresos fiscales" y en que se materialicen otros gastos relacionados, principalmente, con el rescate de las autopistas y con la compensación tras la sentencia del Supremo sobre la gestión de Aigües Ter Llobregat (ATLL).
Controlado el riesgo por Cataluña
En cuanto al crecimiento de la economía española, la Comisión Europea se muestra más optimista que hace unos meses, cuando pronosticó que el incremento del PIB sería del 2,6%. En las previsiones presentadas este jueves prevé que el crecimiento ascienda al 2,9%, tres décimas más.
En este sentido, Bruselas afirma que las consecuencias económicas de la crisis en Cataluña se han controlado y que el ritmo de crecimiento continuará "estable" en los próximos trimestres, dado que las medidas incluidas en el borrador presupuestario apoyarán el consumo privado.
El documento también eleva tres décimas la expansión económica prevista para 2019, que será del 2,4%. Esta desaceleración, explica Bruselas, se debe a una relajación del consumo privado ante un futuro incremento del ahorro de los hogares, un dato que en 2017 alcanzó "un mínimo histórico".
Con respecto al desempleo, el Ejecutivo comunitario cree que se reducirá hasta el 15,3%, para después bajar del 14% un año después, cuando registrará un 13,8%. Por otro lado, pronostica que los salarios crecerán "gradualmente" a lo largo este año y el siguiente, tanto en el sector público como en el privado.