Economía

El INSS está quitando casi un 20% de la pensión a quienes se jubilan a los 63 años aunque tengan 40 cotizados

Un hombre de la tercera edad paseando | Foto: EP

En los últimos meses la viabilidad del sistema de pensiones de nuestro país ha sido objeto de múltiples tertulias. Detractores y defensores se han enzarzado para defender su postura en un momento en el que el Gobierno ha hecho evidente su intención de premiar las jubilaciones demoradas y castigar a los que decidan retirarse del mercado laboral antes de tiempo para garantizar su correcto funcionamiento para los próximos años.

De hecho, desde 2013 se viene aplicando un aumento gradual de la edad de acceso a la jubilación a fin de proteger el régimen de prestaciones en un momento en el que la esperanza de vida es cada vez más alta y, por ende, se entiende que los que puedan acceder a ella, cobrarán la pensión durante más tiempo.

En 2025 la edad de jubilación ordinaria está establecida en los 65 años para los que hayan cotizado 38 años y 3 meses o más a la Seguridad Social y en 66 años y 8 meses para los que lo hayan hecho menos, una cifra que aumentará hasta los 67 dentro de dos años. Y aunque desde el Ejecutivo pretenden incentivar la jubilación demorada, lo cierto es que no todos los trabajadores están dispuestos a retrasar su salida del mercado laboral, aunque ello signifique cobrar más después.

Teniendo esto en cuenta, conviene saber que la Seguridad Social establece unos coeficientes reductores a los que deciden jubilarse antes de tiempo.

Coeficientes reductores de hasta el 21%

La normativa actual permite a los trabajadores que así lo deseen adelantar hasta dos años su salida del mercado laboral, bien porque ya han alcanzado los 40 años cotizados o porque quieren acceder a una modalidad de jubilación anticipada voluntaria. No obstante, hacerlo podría reducir considerablemente la cuantía de su pensión.

Aunque se tienen en cuenta los años cotizados para el cálculo de la prestación, el organismo también se fija en el número de meses que se adelanta la jubilación y establece una tabla de coeficientes reductores que, como su propio nombre indica, pueden reducir la cuantía final de la pensión entre un 2,81% y un 21%:

De este cuadro se extrae que un trabajador que decida jubilarse de forma anticipada a los 63 años (24 meses antes de lo que le correspondería) verá reducida su pensión en un 21% a modo de penalización, dado que el Gobierno recompensa a los que deciden salir del mercado laboral más tarde. Aún así, si tiene más de 44 años y 6 meses trabajados, la reducción será del 13%.

No obstante, si decide adelantar su jubilación tan solo un año, hasta los 64, la reducción será de apenas el 5,55%, un porcentaje considerablemente menor que siempre se aplica una vez calculada la base reguladora.

¿Por qué?

El objetivo detrás de esta medida es motivar a los trabajadores a que opten por la jubilación demorada y no la anticipada, dado que el aumento de la esperanza de vida significa que el trabajador podrá disfrutar de la pensión durante más tiempo. Si decide retirarse antes de lo debido, cobrará la prestación por un periodo más prolongado, comprometiendo considerablemente la estabilidad del sistema, por lo que la cuantía tendrá que reducirse.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky