
Mercedes-Benz ha escogido el Salón del Automóvil de Frankfurt como escenario para mostrar todo su potencial eléctrico. Además del Mercedes-Benz GLC F-Cell, con pila de hidrógeno, y el Mercedes-Benz S 560 e, la versión hibrida enchufable del buque insignia, la firma de la estrella ha dado a conocer el Mercedes EQA, el primer compacto 100% eléctrico.
Tanto por sus dimensiones (4.285 mm x 1.810 mm x 1.428 mm) como por su silueta, el nuevo compacto de la la marca de la estrella evoca al tradicional Clase A. No obstante, más allá de su físico, el rasgo más llamativo reside bajo el capó, donde atesora dos motores eléctricos -uno por eje para dotarle de tracción cuatro- capaces de conceder de forma conjunta más de 272 caballos de potencia y más de 500 Nm. Su aceleración tampoco decepciona: pasa de 0 a 100 km/h en 5 segundos.
Además, su batería, formada por módulos para poder aumentar su capacidad e integrada en el suelo del vehículo, promete más de 400 km de autonomía con una sola carga. Pero más llamativo es el tiempo que tarda en recargarse: tras 10 minutos conectado a punto de carga rápida, el automóvil podrá recorrer otros 100 km. Asimismo, Mercedes asegura que es posible 'repostar' tanto por inducción -sin cables- como a través del wallbox.
A nivel estético, lo más reseñable es el panel de ledes que cambia su apariencia según el modo de conducción seleccionado por el conductor: Sport o Sport Plus.
El Mercedes EQA es fruto del compromiso de la compañía con la tecnología cero emisiones. Su objetivo es que uno de cada cuatro vehículos que se vendan en 2025 sea completamente eléctrico, para lo cual ofrecerá hasta 10 modelos con esta tecnología en 2022. Paralelamente, para dicho año Mercedes-Benz procederá a la plena electrificación de su línea de producción, con lo que los nuevos modelos serán solo híbridos o eléctricos.