
Unicaja anunció a última hora del miércoles que el precio definitivo para su salto al parqué será de 1,1 euros por acción, el menor fijado en una horquilla inicial que iba hasta los 1,4 euros. La entidad sacará al mercado 625 millones de acciones de nueva emisión, que representarán el 40,4% de su capital y comenzará a cotizar mañana bajo el símbolo UNI.
De este modo, la capitalización de Unicaja en bolsa alcanzará los 1.703 millones de euros -frente a los 2.166 millones de euros que se esperaban en el rango alto-, lo que colocará a la entidad en el puesto 50 de la bolsa española y será la séptima entre las ocho entidades financieras cotizadas. Sólo valdrá más que Liberbank, uno de sus comparables directos y frente al que cotizará con una prima del 45% respecto a su valor en libros.
Liberbank presenta, actualmente, un descuento de casi el 70% respecto a su valor contable, el mayor de la banca europea. Respecto a Banco Sabadell, el otro de los comparables utilizados entre la banca mediana nacional, Unicaja saldrá bolsa con un descuento del 35%, ya que la entidad catalana cotiza a 0,74 veces sobre su valor en libros, frente a las 0,48 veces del banco con sede en Málaga.
Una oferta que llegó a estar en duda
Unicaja ha conseguido llevar a término su salida a bolsa, ajustando al máximo su valoración a la baja, a pesar de que, incluso, llegó a dudarse de si finalmente lo lograría dada la situación del sector financiero nacional. La operación se formalizará mediante una ampliación de capital que se podría ampliar en 62,5 millones de títulos adicionales, un 10% de la oferta inicial, en caso de que el green shoe (la parte reservada a las entidades colocadoras) llegara a ejercutarse totalmente.
El folleto de Unicaja llegó justo una semana después de que Banco Santander anunciara la compra de Popular, acechado por activos dudosos que ascendían hasta los 36.000 millones de euros.
Esto marcó directamente la agenda de su salida al mercado porque debía hacerlo antes de que la entidad que preside Ana Botín ampliara capital por 7.000 millones de euros y, entretanto, ha tenido que lidiar con las ventas masivas que afectaron a Liberbank -de quien se puso en duda también su solvencia-, con un Ibex 35 que ha dejado aparcado el rally alcista de comienzos de año y, ya lo último, con una valoración a la baja de BMN por parte de Bankia.
El hecho de que la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri haya adquirido la entidad mediterránea a un valor en libros de 0,41 veces -y no de 0,50 veces según la estimación inicial- ha dado la última vuelta de rosca a la valoración de Unicaja.
Devolverá las ayudas públicas
Unicaja ha explicado que la admisión a cotización le permitirá amortizar los bonos convertibles contingentes (cocos en el argot financiero) de EspañaDuero suscritos por el FROB, instrumentar la compra de la participación del FROB en EspañaDuero y proporcionar liquidez a los actuales accionistas minoritarios de Unicaja Banco.
Con los fondos obtenidos devolverá esa ayuda de 604 millones de dinero público inyectado por el Estado en Caja España-Duero (que fue adquirida por Unicaja) y comprar al FROB por 62 millones la participación que mantiene en la entidad.
Unicaja ha informado de que tras la operación alcanzará "un capital flotante ('free float') del 48,3% de su accionariado sin considerar el potencial ejercicio del 'green shoe" (un 50,3% incluyéndolo) y de que la Fundación Bancaria Unicaja continuará como accionista mayoritario de la entidad.