El precio de la vivienda libre retrocedió el 6,8% en 2011 con respecto a un año antes y se situó en 1.701,8 euros por metro cuadrado, un valor que no se registraba desde comienzos de 2005, según la estadística de precios oficiales que publica hoy el Ministerio de Fomento. El precio de los pisos en alquiler bajó un 6% en 2011.
Con respecto al trimestre anterior, el descenso es del 1,5%, lo que supone una de las caídas más pronunciadas de los últimos meses, en los que el precio de la vivienda no ha dejado de caer.
Con estos datos, el precio medio de la vivienda libre, que ha intensificado su caída a lo largo de 2011, sigue alejado de los máximos que llegó a alcanzar en los primeros tres meses de 2008, cuando se situaba en 2.101,4 euros por metro cuadrado. La de hoy, además, es la caída interanual más pronunciada desde el tercer trimestre de 2009.
De esta forma, el precio medio por metro cuadrado de la vivienda libre ha descendido un 19% en términos nominales desde su nivel máximo alcanzado en el primer trimestre de 2008.
Tasas interanuales de precios

Fuente: Ministerio de Fomento.
En cuanto a la distribución regional, las caídas por encima de la media nacional se localizaron en Aragón (-10,4%), Madrid (-8,2%), Andalucía (-7,8%), Cataluña (-7,7%), La Rioja (-7,6%), Canarias (-7,5%) y Murcia (-7,1%).
Por su parte, las bajadas menos pronunciadas se registraron en Melilla (-2,0%), Extremadura (-2,1%) y Asturias (-2,7%).
Los precios podrían acelerar su caída en 2012
Además, el precio de la vivienda seguirá descendiendo en 2012 e incluso a mayor ritmo si el Gobierno obliga finalmente a las entidades financieras a incrementar sus provisiones sobre los activos inmobiliarios para llevar a cabo el definitivo saneamiento del sistema bancario, según idealista.es.
En un comunicado para valorar la caída de los precios, el portal inmobiliario señala que "los precios han seguido bajando en España y no hay ningún factor que nos haga pensar que en 2012 la cosa vaya a cambiar".
Además, añade que "las provisiones que el Gobierno va a obligar a hacer a los bancos podrían incluso acelerar la caída y producir una espiral de ajustes".
Y es que si los bancos pueden vender más baratos sus pisos porque ya han provisionado el descuento, "a los particulares no les va a quedar más remedio que ajustar sus precios si no quieren quedarse fuera de mercado".