
El precio de la vivienda nueva y usada sigue acelerando. El valor de las casas se incrementó un 9,4% interanual en abril y un 0,9% si se compara con el mes anterior. En términos reales, una vez descontado el efecto de la inflación, la subida se situó en el 7,1%, según la última estadística de Tinsa by Accumin que constata que la subida fue especialmente intensa en Baleares, Canarias, las capitales y grandes ciudades del país.
En concreto, los grupos geográficos que registraron los mayores aumentos de precios en los últimos doce meses fueron las Islas y las Capitales y Grandes Ciudades, con subidas del 14,2% y 10%, respectivamente. Por detrás se situaron la Costa Mediterránea (9,1%), las Áreas Metropolitanas (7,5%) y el grupo Resto de municipios (7%) En todos los casos, las tasas anuales superaron a las registradas en el mes anterior.
En términos mensuales, la variación de precios entre los distintos grupos analizados osciló entre un 0,6% y un 1,3%. Los incrementos más destacados se produjeron en el grupo de las Islas (1,3%) y en la Costa Mediterránea y Capitales y Grandes Ciudades (ambos con un 1,1%). Por el contrario, los aumentos más moderados se registraron en las Áreas Metropolitanas (0,7%) y en los Municipios del Interior (0,6%).
"En abril los precios residenciales han registrado un nuevo impulso por encima de la inflación. La mayor aceleración este mes se concentra en el territorio insular y la costa mediterránea", explica Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa by Accumin. "También continúan creciendo los precios en las capitales y grandes ciudades, mientras que las áreas metropolitanas se sostienen tras los fuertes crecimientos registrados desde comienzos de año".
Para Cristina Arias, el mercado de compraventa residencial mantiene su dinamismo, impulsado por unos niveles de empleo que refuerzan la solvencia de los hogares y por una moderación en el coste hipotecario, lo que favorece el acceso al crédito. "Además, la incertidumbre global derivada de los recientes anuncios arancelarios por parte de Estados Unidos, junto con unos precios residenciales más competitivos en España respecto a otros países europeos, está incentivando el interés inversor", añadió.
Comparativa con máximos históricos
El precio medio de la vivienda en España se sitúa actualmente un 10,5% por debajo de los máximos alcanzados en pleno boom inmobiliario de 2007. En los territorios insulares, sin embargo, el valor nominal supera en un 13,5% el nivel registrado durante la burbuja inmobiliaria. No obstante, ajustado por inflación, dicho valor se encuentra aún un 1 % por debajo.
En el resto de grupos, el precio medio permanece por debajo de los niveles máximos alcanzados en la primera década de los 2000, destacando el grupo de Resto de Municipios, donde la diferencia respecto al pico histórico es del 22,6%.