Prestar utensilios a los compañeros de trabajo o de estudios es algo bastante habitual. Un gesto de compañerismo que esperamos que sea devuelto cuando un día nosotros también necesitamos ayuda. Lo más común es prestarse material de oficina; desde bolígrafos, pasando por calculadoras o incluso los propios folios. Un folio es un préstamo que no se devuelve, sin embargo, cuando prestamos un bolígrafo sí esperamos que venga de vuelta una vez que se termine de usar. Muchas veces no ocurre...
Generalmente por un despiste, muchas veces prestamos bolígrafos y nunca llegan de vuelta. También es posible que nosotros hayamos caído en ello, llevándonos a casa bolígrafos que no son de nuestra propiedad. En caso de que sea un bolígrafo común de unos céntimos no pasa nada, pero hay bolígrafos más caros para profesionales que sí son interesantes recuperar. Sin embargo, existe un truco muy sencillo para que esto no suceda, al menos en un caso concreto de bolígrafos.
Sólo con bolígrafos con tapa
Si quieres que el bolígrafo se te devuelva sí o sí por algún motivo, asegúrate de prestarlo sin la tapa -en caso de que sea un bolígrafo con tapa-. Al dejar de usarlo el compañero de trabajo o de estudio intentará cerrarlo para no manchar las manos, la ropa o los objetos del interior de su mochila. Cuando busque la tapa y no la encuentre, recordará que ese bolígrafo no le pertenece, y te devolverá el bolígrafo para que tu lo tapes.
El truco, compartido por medio de los foros de Reddit, es una buena forma de recordar a los compañeros que te devuelvan el bolígrafo, ya que en la mayoría de los casos se trata de una acción involuntaria que responde a un olvido comprensible.