
Aunque la baraja española sea menos conocida en el mundo que la baraja francesa o la baraja de póquer, ya que esta se encuentra en la mayoría de casinos del planeta, lo cierto es que la baraja de cuarenta y ocho naipes de nuestra tierra es también muy interesante. Nuevamente estamos ante una baraja de cuatro palos, pero se cambian los rombos, tréboles, picas y corazones por los bastos, oros, espadas y copas de los naipes españoles. ¿Conoces el origen y el significado de estos símbolos de la baraja española?
Nuestra baraja tiene alrededor de 600 años, por lo que para saber qué significan sus símbolos debemos tener en cuenta la historia de la época. Aunque no existe una explicación 100% concreta, la más fiable es la aportada por Antoine Court de Gébelin en 1781, quien asoció los símbolos a estatus de sociedades medievales.
Por ejemplo, en el caso de los oros su simbología es muy sencilla. El oro de la época era dinero, y representaba al comercio. Otro de los pilares de la época era la iglesia, el clero, representados por medio de las copas. Tras el comercio y la iglesia, faltan por representar los campesinos y los nombres. El campesinado y la agricultura se representan por medio de los bastos, mientras que las espadas representan a los nobles y militares.
El diseño de Heraclio Fournier
En cuanto al diseño que tenemos hoy en día, su origen proviene del burgalés francés Heraclio Fournier, cuyo diseño fue premiado en la Exposición Universal de París. El diseño actual es una evolución del pintor Augusto Rius de 1889.
Con respecto a la baraja francesa, una teoría afirma que en realidad procede de la baraja alemana, cuyos símbolos son campanas, bellotas, corazones y hojas. Sin embargo, la baraja alemana también podría proceder de la española, motivo por el que en último lugar la baraja de póquer en última instancia es una evolución en varios pasos de nuestra baraja.