El frío o una oficina mal climatizada no son necesariamente las razones por las que tu nariz parece estar helada mientras trabajas. Algunos estudios sugieren que cuando estamos mentalmente sobrecargados, el flujo sanguíneo se desvía para dar toda la energía necesaria a nuestro cerebro.
La próxima vez que sospeches que estás exagerando demasiado las cosas mentalmente, un chequeo rápido de la temperatura de la nariz podría ser esclarecedor: una vez más, la ciencia tiene respuesta a por qué tenemos la nariz fría mientras trabajamos.
Un nuevo estudio publicado en la revista Human Factors sugiere que cuando el cerebro está abrumado y por ende sufre de estrés, el flujo sanguíneo se desvía de las extremidades faciales a las neuronas, lo que resulta en una nariz fría.
Para observar cómo responden nuestros cuerpos a las pesadas cargas de trabajo cerebral, los investigadores utilizaron cámaras termográficas en rostros de 14 voluntarios mientras llevaban a cabo tareas mentales con diferentes niveles de dificultad.
A cada nivel que iban superando, los científicos puntuaron periódicamente cuán duro trabajaban usando escalas y cuestionarios. A la par los investigadores también midieron los latidos del corazón, las frecuencias respiratorias y la dilatación de las pupilas.
Los resultados variaron entre los diferentes sujetos, pero los investigadores descubrieron que la temperatura de la nariz disminuyó alrededor de un grado centígrado en aquellos sujetos que se sentían abrumados con los ejercicios. A ello se le añade el diámetro de las pupilas, que fueron buenos predictores de un rendimiento cognitivo intenso.
Trabajo. Imagen: Pexels
La sangre se desvía al cerebro para recibir energía extra
Según insinúan los científicos, la razón por la cual la nariz se queda fría es que la sangre está siendo naturalmente dirigida al cerebro para recibir energía extra y poder rendir en su totalidad.
Tal y como señala el estudio, los niveles excesivos de demanda mental puede dañar la ejecución de algunos cargos laborales. Además, los investigadores agregan que la técnica de la imagen térmica utilizada en el estudio podría ser beneficiosa en muchos puestos de trabajo para monitorear si los empleados con horas irregulares, como pilotos de avión o maquinistas, están trabajando a un nivel que podría ser perjudicial para su desempeño.