Los huracanes, ciclones y tifones son el mismo fenómeno climático; sólo se diferencian los nombres que usamos para diferenciar las zonas en que tienen lugar. En los océanos Pacífico oriental y Atlántico se utiliza el término 'huracán', si se producen en el noroeste del océano Pacífico se denomina 'tifón' y si ocurren en el sur del Pacífico o en el océano Índico, 'ciclón'.
Los ingredientes para este tipo de tormentas incluyen las perturbaciones meteorológicas de una temperatura tropical en los océanos, lluvias torrenciales y vientos relativamente ligeros. Si estas condiciones son permanentes durante un largo período de tiempo, pueden convertirse en vientos violentos, olas de gran tamaño, lluvias fuertes e inundaciones que ya asociamos con este fenómeno.
Cada año somos cómplices de impresionantes desastres naturales provocados por los huracanes. Repasamos algunos de los más devastadores que pusieron en jaque a la humanidad.
San Calixto II
O 'El Gran Huracán de 1780' azotó las Islas Martinica, San Eustaquio y Barbados con vientos que superaban los 320 Km/h. Dejó a su paso la escalofriante cifra de 27.500 víctimas mortales, muchas de ellas producidas en el mar entre las flotas de navíos españoles y holandeses, pero especialmente entre franceses y británicos que se encontraban en el Mar Caribe. Ocurrió del 10 al 16 de octubre durante la Revolución Americana, siendo para muchos el huracán más destructivo de la historia en la cuenca atlántica con el mayor número de víctimas documentados.
Representación de El Gran Huracán de 1780. Imagen: Museo Nacional Marino
Sandy
Tras atravesar Jamaica, Cuba y Haití, la inmensa tormenta se redujo a un ciclón post-tropical antes de llegar a Estados Unidos en octubre de 2012. Pero permaneció el suficiente período de tiempo como para volver a coger fuerzas y causar estragos en Nueva York y la costa de Jersey. Olas de más de 4 metros dejaron partes de Manhattan bajo el agua y los residentes de todo el municipio sin luz durante días. Mientras tanto, Sandy destruyó cerca de 650.000 hogares en la región noroeste y acabó con la vida de 117 personas en Estados Unidos, así como otras 69 en Canadá y en el Caribe. Con daños de un valor de 65 mil millones, Sandy fue el tercer huracán más costoso de Estados Unidos.
Huracán Sandy. Imagen: Wikipedia
Mitch
El huracán Mitch se formó a partir de una onda tropical en el Atlántico que pronto pasó a ser depresión tropical y más tarde una fuerte tormenta tropical. Fue en este momento cuando se le asignó el nombre de Mitch; la tormenta tropical se transformó en huracán el 24 de octubre y a los dos días ya había alcanzado la categoría 5. Fue el segundo huracán más mortífero de la vertiente atlántica; unos vientos sostenidos de 290 Km/h y 18.000 muertos en América Central entre el 22 de octubre y el 5 de noviembre de 1998.
Huracán Mitch. Imagen: Wikipedia
Katrina
El famoso huracán Katrina asoló el sur y el centro de los EE.UU en agosto de 2005. Se formó sobre las Bahamas y comenzó siendo un huracán de categoría uno tocando tierra en el norte de Miami; durante esta primera etapa el Katrina dejó once muertos y grandes inundaciones.
La ciudad de Nueva Orleans quedó completamente inundada. Tras pasar por Miami se debilitó y se transformó en una tormenta tropical que al pasar por el Golfo de México y al mezclarse con las aguas cálidas del golfo, se convirtió en un huracán de categoría 5. A su paso, vientos de 280 Km/h dejando 1.836 víctimas mortales y 705 desaparecidos. Fue el huracán que ha provocado más daños económicos, así como ser uno de los cinco huracanes más mortíferos de la historia de Estados Unidos.
Nueva Orleans después de Katrina. Imagen: Gettyimages
Irma
El huracán Irma es una de las tormentas más fuertes jamás registradas en el Atlántico, que pasó este miércoles 6 de septiembre al norte de Puerto rico con una velocidad de 295 Km/h. El huracán se ha denominado de categoría 5, dejando 11 muertos en las diferentes islas, más de 900.000 puertorriqueños sin energía eléctrica y aproximadamente 2.800 personas refugiadas. Este viernes se prevé que Irma cruce Cuba; todas las provincias de estas zonas están en alerta y Cuba está preparada para evacuar a sus residentes.