El viaje de esta semana lo dedicamos a aventurarnos en las profundidades del país egipcio. Un país que ofrece un sinfín de posibilidades para reactivar el cuerpo y la mente.
Egipto es desierto en un 95%. Sus condiciones permiten hacer numerosas actividades de aventura que atraen a miles de turistas cada año. En el Cañón Blanco podemos realizar un safari en camello o en 4x4 hacia el oasis de Ain Khudra, donde podemos acampar y admirar la noche estrellada. El alto contenido en cal de sus rocas hace que las paredes sean de un color blanco puro, ideal para contemplar mientras ascendemos el cañón.
Wadi Ghazala, situada en el interior del Sinaí, reúne las condiciones perfectas para practicar senderismo por cuevas, dunas y acacias en el fondo del valle.
Una forma diferente de recorrer el desierto es hacerlo montado en un quad. Este vehículo es muy fácil de encontrar en todos los destinos del Mar Rojo, desde donde se puede salir hacia el Desierto Oriental de Egipto. También se puede alquilar al atardecer en los oasis del Desierto Occidental, pudiéndolo conducir libremente por un paisaje desértico.
Otra opción para vivir la calma de las dunas, las maravillas de la naturaleza y las antiguas ruinas es hacer un safari, una experiencia incomparable que puede durar horas y días. Los guías de Egipto -reconocidos internacionalmente-, te llevarán al Gran Mar de Arena y a otros lugares remotos. Recuerda que es necesario solicitar un permiso militar para adentrarse en estos safaris.
Si eres de los más atrevidos, no pierdas la oportunidad de practicar surf en las gigantes dunas del Gran Mar de Arena, cerca de Siwa, que poseen las perfectas condiciones para ellos: lisas y pronunciadas, con alturas de hasta 140 metros. Además, si vivir esta experiencia no fuera suficiente, podrás disfrutar de unas asombrosas vistas del desierto.
Egipto, destino del buceo mundial
Para los que prefieran practicar actividades acuáticas, Egipto es uno de esos destinos que buceadores de todo el mundo eligen para disfrutar de este deporte.
Dhahab, al norte de la turística Sharm el Sheikh, es uno de los mejores sitios de buceo del Mar Rojo por sus más de 16 metros de profundidad. Además, presenta un fondo de lo más variado con picos de corales, valles, corredores, anfiteatros sumergidos y hermosos arrecifes cercanos a las costas.
Otro sitio de visita obligada para los amantes del buceo es Anemone City, situado dentro del Parque Ras Mohammed y muy cercano al popular y concurrido Shark Reef. Tiene uno de los arrecifes más agradables de la zona, con una característica densidad de anémonas y corales.
La costa cerca a El Quseir, en el sur de Egipto, es inmensa, con kilómetros de arrecifes apenas explorados. Sus laberintos de coral, la gran cantidad de bancos de peces de arrecife y posibles encuentros con tiburones de punta blanca y rayas moteadas azules son varias de las experiencias que se pueden vivir en sus aguas.
El Kaf, también en El Quseir, contiene una gran variedad de corales y peces. Al norte de la isla se encuentra la costa más rocosa, poco frecuentada por sus condiciones de viento y marea, aunque ofrecen excelentes buceos para los que tengan más experiencia.
Egipto y sus innumerables inmersiones hacen del Mar Rojo un destino difícil de olvidar por cualquier amante de este deporte.
Relax en un spa
Para finalizar con esta ruta aventurera, relájate y estimula tu mente en un exclusivo complejo de la ribera del Mar Rojo, en uno de sus spas con fama mundial o, por qué no, en la piscina de agua de la cubierta de un crucero por el Nilo. Acompáñalo probando la gran variedad de sabores de las shishas y un té en alguna de sus tradicionales cafeterías.
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