Dar a conocer todas las posibilidades de la gastronomía vegetariana y hacerlo en un entorno en el que el cliente se sienta como en su casa fue la motivación que llevó a Celia Aragó y Olga Vázquez a dar el salto desde su trabajo en el mundo del marketing a la hostelería. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Comunitat Valenciana
Cinco años después, Grupo Copenhagen gestiona cuatro restaurantes en Valencia-Copenhagen, Malmö, Oslo y Helsinki- y acaba de abrir el primero en Madrid, en el barrio Salamanca.
¿Cuál es la clave del éxito de la cocina del Grupo Copenhagen?
Confiar en nuestro trabajo y modelo de negocio. Ambas somos vegetarianas y nos planteamos cambiar el concepto de esta cocina. Cada vez hay más clientes interesados en una alimentación más sana y equilibrada y una mayor conciencia ecologista. Pero hacía falta una comida más sabrosa, más divertida y con más estilo. Cuando se habla de vegetarianismo sólo se piensa en verduras, pero hay multitud de productos y posibilidades. Nos propusimos acercar la comida vegetariana también a los no vegetarianos. Apostamos por productos frescos de temporada y productos artesanales -por ejemplo, las cervezas-. Creemos que es posible dar un servicio de calidad a buen precio.
No sólo la cocina, sino también el ambiente rompe con la imagen esperada de un restaurante vegetariano.
La cocina implica creatividad, no sólo en los platos, sino también en su presentación y en la creación de ambientes. El cliente tiene que sentirse atraído para entrar en el local, y, una vez dentro, estar cómodo. Hay vegetarianos muy buenos en Valencia, pero, a nivel de estilo, tienden a una decoración similar. Hacemos cocina vegetariana de vanguardia en un espacio arquitectónico cuidado, de inspiración nórdica, con líneas sencillas y colores claros, que simboliza la vida sana, la cultura del bienestar, buscando una simbiosis entre arquitectura, diseño y oferta culinaria.
Tras la reciente apertura en Madrid, ¿tienen otros proyectos de expansión?
No queremos quedarnos ancladas, pero, en este momento, no hay previstos nuevos restaurantes. Desde el principio, hemos reinvertido los beneficios y apostamos por los locales en propiedad. La franquicia es interesante y no la descartamos de cara al futuro, pero siempre que no desvirtúe el modelo, tanto en la comida como en servicio.
