El 51,95% de los economistas de la Comunitat Valenciana considera que la situación económica de la Comunidad Valenciana sigue igual que hace un año, con una situación de "estancamiento económico" que preocupa a los profesionales, según la conclusión de la encuesta trimestral 'Los economistas opinan' -en la que participaron 872 colegiados-. Los decanos de los Colegios de Economistas de las tres provincias destacan dos factores que provocarían esta percepción: la incertidumbre política y el déficit de inversiones en infraestructuras.
En la anterior edición, realizada en marzo, la incertidumbre política y económica ya hizo mella en la confianza de los encuestados, que rebajaban las valoraciones de la economía española y de la Comunidad, rompiendo una tendencia ascendente iniciada en 2013. En esta encuesta, ambas valoraciones vuelven a caer ligeramente: suspenden tanto la economía nacional (con 4,88 puntos sobre 10) como la de la Comunidad (con 4,42 puntos).
Para el 26,03%, la economía de la región ha mejorado, tres puntos menos que en marzo y ocho menos que en diciembre, mientras que el 21,22% cree que se ha deteriorado en este periodo, tres puntos más que en marzo y siete que en diciembre. En Alicante, habitualmente la provincia más optimista en esta serie de encuestas, es donde más se acusa esta rebaja de las expectativas.
"El periodo de incertidumbre política ha lastrado el crecimiento económico. En la encuesta realizada hace un año se observaba un repunte en las expectativas económicas; ahora nos encontramos en una fase no de pesimismo, pero sí de estancamiento. No se pueden tomar ciertas decisiones de índole económica cuando el marco no está claro", ha reconocido el decano del COEV, Juan Manuel Pérez Mira. Un aspecto a tener en cuenta, es que los economistas respondieron a la encuesta entre el 24 de mayo y el 7 de junio, antes de la celebración de Elecciones Generales en España y del referéndum del 'Brexit'.
De hecho, las perspectivas mejoran con un horizonte a medio plazo -seis meses-, en el que los expertos esperan que ya se haya conformado el nuevo Gobierno central. La previsión de la economía española para finales de año señala una sensible mejoría (con 4,98 puntos), "acercándose al aprobado". También el pronóstico a seis meses de la economía de la Comunidad (4,56) supera la valoración actual y la de las anteriores ediciones. "Después de las dudas generadas, se confía en que la economía recupere parte del terreno perdido en lo que queda de año", apunta Juan Manuel Pérez Mira, decano del Colegio de Economistas de Valencia.
Jaime Querol, decano de Castellón, destaca que el déficit de inversión en infraestructuras está pesando, cada vez en mayor medida, en las perspectivas de los economistas. "Estamos trabajando mucho en la región y hay sectores que están funcionando muy bien, como el turismo, automoción, agroalimentario o el cerámico, pero el sentir general es que la falta de inversiones nos penaliza y nos sitúa en un segundo lugar en cuanto a perspectivas de evolución".
En esta línea, una de las conclusiones del sondeo es la relevancia que los economistas conceden al Corredor Mediterráneo como infraestructura clave para "dinamizar el sector industrial, atraer inversiones extranjeras y potenciar el turismo".
Necesidad de políticas expansivas
En esta edición de 'Los economistas opinan' se ha sometido a valoración, también, el punto de equilibrio entre las medidas de austeridad y las políticas expansivas, "con un resultado de 5,41 sobre 10, inclinándose ligeramente hacia unas políticas más expansivas. Dos tercios de los economistas se posicionan en la horquilla del 5 al 8, anteponiendo la necesidad de crecer a la reducción imperiosa de la deuda pública. El crecimiento económico, sin descuidar el déficit público, parece la fórmula elegida por los economistas en el momento actual. Que el Estado vuelva a inyectar gasto público en la economía, pero preservando la consolidación fiscal", según Pérez Mira.
Preguntados por el tratamiento legal que merecen los negocios de economía colaborativa que conectan a los usuarios entre sí a través de Internet, la mayoría de economistas reconoce que estas actividades "permiten optimizar recursos y abaratar costes, pero presentan problemas de índole legal y a terceros, por lo que deberían estar debidamente reguladas". También defienden que "aquellas actividades que entrañan riesgos para las personas, o que sortean regulaciones que perjudican a otros sectores productivos establecidos, deberían estar completamente prohibidas", según detalló Francisco Menargues, decano del Colegio de Economistas de Alicante.
El paro, el principal problema
El paro sigue siendo, con diferencia, el problema que más preocupa a los economistas, muy por encima de los dos siguientes: la inadecuada dimensión y estructura de las empresas valencianas y la evolución de la demanda. En Alicante, la inquietud por la escasez en el abastecimiento de agua es considerablemente más alta que en Valencia y Castellón.
"Tenemos un grave problema de temporalidad en el empleo, por la fuerte estacionalidad de sectores clave, como el turismo. Lo que tenemos que hacer es apostar por fomentar la industria, que es la que crea puestos de trabajo estables", destaca Menargues.