La zona franca de Alicante defendida por la Diputación provincial requeriría de una inversión de 27 millones de euros y supondría la generación unos 14.836 empleos en diez años, con una facturación anual de 1.225 millones de euros, según un informe del Instituto de Estudios Económicos de la Provincia de Alicante (Ineca). Por ello, Ineca considera que "la zona franca como elemento central para impulsar la provincia de Alicante como territorio inteligente y atractivo para la inversión nacional e internacional" y que la inversión podría ser subvencionada por el Gobierno de España, la Generalitat Valenciana, la Diputación y la Unión Europea.
Las conclusiones del estudio revelan que la zona idónea para situar la zona franca estaría en el Puerto de Alicante y en el Parque Industrial de Elche. Dos centros, elegidos tras el análisis de otras ubicaciones, por su buena accesibilidad por carretera y ferroviaria. De igual modo, se propone otra posible zona agregada al Puerto de Alicante que estaría en Bacarot.
El presidente de Ineca, Perfecto Palacio, ha explicado que la potencial de implantación de una zona franca en la provincia, tomando el Puerto de Alicante como núcleo, potenciaría la conexión industrial Alicante-Elche y lo convertiría en una realidad tangible y cuantificable. Los derechos arancelarios ascenderían a 36,7 millones de euros al año, los impuestos estatales se situarían en 321 millones y los municipales estarían en torno a los 10 millones de euros.
"Es necesario que finalicen las obras del Corredor Mediterráneo, que podrían convertir a la provincia en un importante nodo de conexión intermodal y enlace comercial con países extracomunitarios, especialmente el norte de África", ha aseverado. "Esta situación geoestratégica puede ser el rasgo diferencial de otras zonas francas de España, lo que puede atraer inversiones y flujos de mercancías hasta ahora impensables ante la falta de proyectos diferenciados", añade.
Palacio ha incidido en que "la colaboración público privada es necesaria en los actuales modelos globales, donde tanto instituciones como sociedad tienen su espacio para poder participar".
El directivo señala que Alicante es la quinta provincia en aportación al PIB de España, con un saldo de exportaciones positivo, mientras que el conjunto de España sigue en valores negativos y que es un destino turístico de referencia, pero también ha recordado que "somos una de las peores provincias financiadas en la Comunidad peor financiada; con una tasa de desempleo del 23% y una renta per cápita que ha caído un 30% en la última década.
El director de Proyectos de Ineca y coordinador del estudio, Joaquín Melgarejo, ha explicado durante la presentación del informe que "la oportunidad para Alicante es clara y para ello debe preparar su oferta logística, sus infraestructuras y los procesos de gestión para atraer el importante volumen comercial".