El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se ha desmarcado del secretario general de su partido, Pedro Sánchez, al apuntar que, aunque su liderazgo "está consolidado", esta situación podría cambiar en función de los resultados de las elecciones generales de diciembre. "Todo en la vida, efectivamente, es revisable", afirmó. Consciente del posible impacto de sus palabras, Puig se apresuró a matizar que Sánchez "está haciendo bien su trabajo, con un proceso renovación muy valiente, y tiene el aval del partido".
No obstante, Puig, que participó en un evento organizado por Europa Press, junto al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y el secretario de Organización del PSOE, César Luena, volvió a marcar distancias con Sánchez al hablar de Cataluña. Puig abogó por su reconocimiento como "nación", tal y como recogía el Estatut de autonomía catalán de 2006, consideración que fue anulada por el Tribunal Constitucional en 2010, "como solución al problema secesionista". "Yo en los términos en los que se habla de nación en el preámbulo que aprobó el Congreso de los Diputados creo que no hay ningún problema". Esta aceptación implicaría una reforma de la Constitución. Sánchez se ha pronunciado en contra de este reconocimiento.
"Si vamos a una reforma constitucional sería absolutamente necesario empezar por el principio y constitucionalizar aquello que se aprobó por el parlamento de España. Es bastante claro", ha reafirmado, tras señalar, durante su discurso, que "le corresponde a las fuerzas democráticas que quieren que Cataluña siga en España formular una propuesta de recuperación de lo anulado por la sentencia del Estatut".
Puig reivindicó la necesidad de respetar lo que en su momento aprobó la Cámara Baja y los ciudadanos catalanes. "El pueblo de Cataluña hizo un referéndum y aprobó un estatuto", ha reiterado. "Los que queremos que Cataluña esté en España tenemos que hacer algo. No podemos sólo decir: Ahí está la ley. Luego así van las cosas. Soy más optimista, hay que hacer algo", ha defendido. El presidente valenciano criticó la "enorme dejadez" que, a su juicio, ha caracterizado la gestión del Gobierno de Mariano Rajoy sobre esta cuestión durante los últimos cuatro años.
En este sentido, ha señalado que limitarse a convocar la ley, la Constitución o la justicia "no es la respuesta". "Es una dejación de responsabilidad. Hay que convocar la política, pero no cualquier política, sino la política del reencuentro. Hay que reconstruir un diálogo compartido desde el Estatut y la sentencia", ha reiterado. "La Comunidad Valenciana quiere ser puente entre Cataluña y España", ha apostillado, tras afirmar que "el diálogo no es sólo una cuestión instrumental", pues "sin diálogo no hay democracia".
Nuevas vías de participación de Cataluña en la UE
Además de recuperar lo "anulado" por el Estatut, Puig ha propuesto abrir nuevas vías de participación de Cataluña en la Unión Europea para solucionar la cuestión territorial, así como convocar la comisión bilateral Estado-Generalitat. "Hay que intentar recuperar los afectos y luego tomar la iniciativa del diálogo y la propuesta", ha afirmado, para avisar de que quien no esté en ese consenso "no querrá el reencuentro".
Asimismo, ha asegurado que recuperar esta cuestión no afectaría a la soberanía. "Quedaría como está", ha afirmado, para añadir que solucionar la cuestión territorial "no es un problema de soberanía sino de cómo se adapta un Estado autonómico que ha tenido su historia de éxitos pero que ahora tiene que revisarse".
"Hay asimetrías enormes en los derechos de los ciudadanos. Se ha evidenciado la falta de elementos de cohesión, la falta de un Senado que sirva como espacio de debate territorial, la falta de actuaciones sectoriales", ha denunciado. "Podemos hacer muchas cosas. Federar es unir", ha sentenciado, tras defender la "solución federal" que propone el PSOE, que ya ha sido "ensayada con éxito" en otros países como Alemania o Estados Unidos.
Evita inclinarse por Podemos o C's
El presidente valenciano no ha querido pronunciarse sobre el escenario de pactos que puede abrirse después de las generales y ha evitado responder si cree que puede haber más sintonía con Podemos o con Ciudadanos. Puig ha recalcado que con quien tiene "más sintonía" su partido es con "el espacio electoral que representa el centro izquierda", que es un espacio que tiene que "defender con uñas y dientes" porque es el suyo y el que mejor representa.
Y serán los ciudadanos, ha dicho, los que decidan qué tipo de gobierno va a haber. "Vamos a ver cómo acaba todo", ha afirmado, insistiendo en que son los ciudadanos los que "mandan" y apuntando, además, que, en el nuevo escenario, con los nuevos partidos, hay "algunos que se están haciendo viejos rápido".
Puig ha remachado que lo importante es que haya un nuevo proyecto para España que "suture las fracturas" y que el PSOE sea capaz de ofrecer un "proyecto de modernización y de ordenación territorial", también en el ámbito institucional que supere la crisis que ha atravesado España en los últimos años.
A su juicio, la única institución que ha respondido hasta ahora de manera "clara y decisiva" a los cambios en España ha sido la monarquía. Esta respuesta ha provocado comentarios entre el público ya que minutos antes Puig se había declarado como republicano. A la pregunta del moderador, ha puntualizado que es de "valores republicanos".