
Ciudad de la Luz ha dado un paso más hacia su cambio de propietario tras aprobar el consejo de administración del complejo cinematográfico el pliego de condiciones para su venta. El documento contempla un plazo de 60 días para que los interesados en los estudios alicantinos presenten ofertas, una vez los pliegos se hayan publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea, lo que está previsto que ocurra en los próximos días. Estos plazos dejan el cierre de la operación en manos del futuro gobierno autonómico.
El complejo alicantino, que ha acogido el rodaje de grandes superproducciones cinematográficas, sale a subasta ante su imposibilidad de devolver 265 millones de euros que recibió en ayudas públicas durante su construcción, investigada y consideradas ilegales por las autoridades europeas. Además, acumula una deuda de más de 200 millones de euros.
Los estudios se adjudicarán a la oferta económica más ventajosa, presentada por el conjunto o por cada uno de los seis lotes en que se han dividido. Se parte de un importe mínimo de licitación equivalente al valor contable del complejo (que en 2012 se estimó en unos 126 millones), pero esta cantidad es considerada poco realista, teniendo en cuenta los ajustes en el mercado inmobiliario. Si esa subasta queda desierta, se abrirá un segundo sobre, sin límite. Si ninguna oferta se estima suficiente, puede declararse desierta.
Bruselas ha accedido a la petición de la Generalitat de excluir de la venta el Centro de Estudios, que mantendrá su uso para formación, y un edificio de 18.000 metros cuadrados que se utilizará para un futuro Palacio de Congresos, así como las instalaciones destinadas a restauración, oficinas y aparcamientos.
Inversores interesados
Desde que se anunció su venta, se ha hablado de varios inversores interesados en la adquisición de los estudios, desde la encabezada por el cineasta Francis Ford Coppola hasta la que habrían planteado un grupo de empresarios chinos con intereses inmobiliarios.
Es ahora cuando se verá el interés real que suscita el complejo y hasta dónde están dispuestos a llegar los inversores con las ofertas. Los importes que se han barajado hasta el momento están muy por debajo tanto de los niveles de endeudamiento como del valor contable atribuido a las instalaciones.
De hecho, desde los partidos de la oposición en la Comunidad Valenciana (como el PSPV o Compromís) ya se ha advertido que se descartará la venta si no se logra alcanzar propuestas satisfactorias.
Los plazos dejan la decisión en manos del futuro gobierno de la Comunidad Valenciana. Tendremos que esperar a finales del verano o al próximo otoño para conocer la identidad del futuro gestor de Ciudad de la Luz.