
En 2012, Singapur obtuvo las calificaciones más altas en el Informe Pisa: en Matemáticas obtuvo 79 puntos por encima del promedio internacional y en lectura anotó 46 puntos.
El mérito, el esfuerzo, el bilingüismo (el inglés es la primera lengua que aprenden los niños en la escuela desde preescolar, además de su lengua materna de mandarín, malayo o tamil), la presión familiar y la segregación por sexos son las claves del éxito del sistema singapurense.
Sistema meritocrático
El sistema es meritocrático de manera descarada (algunos podrían decir elitista) en su enfoque en la identificación y desarrollo del mejor talento, y se dirige al servicio público.
El método está centrado en la transmisión de conocimientos currículo convencional y resultados de los exámenes. Los docentes motivan a sus estudiantes, se les fomenta la creatividad, el conocer, investigar, etc.
El país ya ha superado el analfabetismo que tenía en 1960. Ha atraído a los mejores y los ha incorporado en el sistema de educación. Invierte aproximadamente 11.500 millones de dólares cada año en más de 510.000 alumnos, atendidos por 34.000 profesores y 5.500 administradores. Una gran parte de los fondos se comprometen a la preparación, el apoyo y la remuneración de los profesores, que son los mejor pagados del mundo (35.000 euros).
Selección del profesorado
La selección y capacitación de los maestros se convierte en el ingrediente secreto. Se invierten 100 horas para formar y mejorar al profesorado. Además, invierten menos en educación que España, la diferencia es que ellos lo gastan de manera diferente. Destinan mucho dinero a la capacidad profesional y luego se ahorran invertir más en las aulas. Además, también existe una puerta giratoria desde el Ministerio de Educación. Los educadores están seleccionados, con frecuencia, para llevar a cabo el trabajo político. Muchos, tras años de dedicación a la política, optan por regresar a las aulas.
Desde 1991, se han lanzado cinco planes quinquenales para mejorar la ciencia, la tecnología y la innovación. El primero tuvo una inversión de 2.000 millones de dólares; el segundo, en 1996, 4.000 millones de dólares; el tercero, en 2001, 6.000 millones de dólares; el cuarto, en 2006, 13.900 millones de dólares; mientras que el actual de 2011-15, 16.100 millones de dólares.
Los tipos de escuelas son como en España: pública, concertada, privada e internacional (la británica, la australiana, etc.). El paso de la primaria a la secundaria se regula mediante un examen llamado PSLE (Primary School Leaving Examination), que es aprobado por el 98% de los alumnos. En función de los resultados, los alumnos pasan a secundaria en una de las tres vías siguientes: Express, NA (Normal Academic) o NT (Normal Technical). Una vez finalizada la Secundaria, los alumnos realizan la O Levels, otro tipo de reválida que segrega a los alumnos en otros tres niveles, los de la express pasan al Bachillerato y de ahí a la universidad, previa selectividad (A Levels ) y, el resto, trabaja o se dedica a la Formación Profesional.
Jornada escolar
Los estudiantes comienzan su jornada escolar a las 7:20h y terminan sobre las 13h o 14h. Esto refleja que la cantidad de horas no es lo importante, sino la calidad con la que se enseña.
Según estudios internacionales, las madres en Asia invierten 10 veces más tiempo ayudando a sus hijos con sus tareas en sus casas que las madres latinoamericanas. Además, las familias recurren a clases particulares para que los alumnos consigan los niveles de exigencia requeridos.
El objetivo de la escuela es preparar al alumno para la universidad y encontrar lo antes posible "su talento". Singapur cuenta con dos universidades entre las 75 primeras en la última Times Higher Educación World University Rankings, el mismo número que China, Japón y Alemania.
Becas con servicio público
Un sistema nacional de becas permite a los mejores estudiantes ir a las universidades más importantes del mundo. Los destinos habituales para los universitarios que se marchan fuera a estudiar una carrera son Australia, Nueva Zelanda, Reino Unido y la costa oeste de Canadá y EEUU. Los beneficiarios están obligados a servir en el sector público durante un mínimo de dos años por cada año de estudio.
La educación obsesiona en exceso. Los billetes de dólares del país tienen pintado un aula con alumnos escuchando al profesor, con una universidad al fondo y la palabra "Educación" escrita debajo.
El 40% de la población es extranjera y el 15% millonaria. El índice de desempleo ronda el 2% y la xenofobia gana adeptos porque la oposición (izquierda china) no quiere a más extranjeros.