
Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña y Canarias concentraron en julio el 60% de las pernoctaciones de los españoles en establecimientos hoteleros. De ellas, Cataluña, con el 14,2% del total, sufrió un descenso del 7,2% en términos anuales, muy superior a las seis décimas de Levante o las subidas del 1% en Canarias y el 4,9% en Andalucía.
De los 11,68 millones de turistas que pernoctaron en hoteles, 5,37 millones eran residentes en España, según los datos del INE.
En el caso de los turistas extranjeros, 6,32 millones, el principal destino fue al archipiélago balear, con un 35% de pernoctaciones y un aumento del 1,1% respecto a julio de 2017. Cataluña, con un 20,7% es la segunda, aunque también registra un descenso de los extranjeros, un 6,2%. Canarias es la tercera comunidad que más atrajo a viajeros no residentes, con el 18,9% del total, y una bajada del 5,4% respecto al año anterior.
Un mal verano
A nivel nacional, julio registró por segundo mes consecutivo un descenso en el número de pernoctaciones en establecimientos hoteleros, que baja un 2,2% respecto al mismo mes del año pasado. En junio la bajada fue del 1,2%, lo que augura un verano peor que el del pasado 2017. Los menores registros se dan tanto en el caso de las pernoctaciones de viajeros españoles, con una disminución del 1,1%, y en mayor intensidad para el caso de los turistas no residentes, cuyas pernoctaciones caen en julio un 2,7% respecto al mismo mes de 2017. En julio hubo 11,68 millones de viajeros que sumaron 42,7 millones de pernoctaciones, con una estancia media de 3,65 días.
En julio se cubre el 71,1% de las plazas ofertadas, con un descenso anual del 2,4%. El grado de ocupación por plazas en fin de semana baja un nueve décimas y se sitúa en el 75,9%. De los grandes destinos, Andalucía tuvo el menor grado de ocupación, el 66,7%, y después Cataluña, el 74%. La media nacional se situó en el 71,1% y Baleares registró la mejor cifra de ocupación, con cerca del 90%. Castilla La Mancha, en cola, solo cubrió el 32% de la oferta hotelera.
Cataluña también se coloca entre las peores autonomías en los precios de las habitaciones que descendieron de media un 1,95%, la mayor caída entre los grandes destinos y sólo superada por Cantabria y Navarra. De media, el precio de los alojamientos hoteleros creció en julio un 1,2%. Como consecuencia de la caída de precios y de estancias, la rentabilidad en Cataluña baja un 2,88%. También cae en Asturias, 4,62%, Galicia, 3,3%, y Navarra con un 6,7%. De media, subió un 1,15%.