Turismo y Viajes

Kassel y Münster, cien días en la vanguardia del arte internacional

-No se preocupe señor, probablemente es una performance específica para este sitio!

El chiste que acaba de leer no es un chiste... es decir: parece ser que no tiene el propósito de hacer reír -aunque la interpretación del humor (como la del arte)- es libre.

Se trata de una sutil intervención explicativa con la que el dibujante de comics Sany (Samuel Nyholm) quiere llamar la atención sobre los escenarios del mundo artístico, destacando las malas interpretaciones. Representa un malentendido en el arte destacando la diferencia entre un símbolo y su significado. Sus mensajes, que pueden verse en tarjetas postales y pegatinas, forman parte de la campaña publicitaria de verano de la ciudad de Münster, una tranquila ciudad alemana situada en la región de Renania del Norte-Westfalia, con un censo de 300.000 habitantes, de los cuales 60.000 son estudiantes… ¡y todos van en bicicleta!

Calles de Münster. // FOTOGRAFÍAS: Laura Crawford

En Münster, para gozar del arte no es necesario acudir a sus museos: el "arte en la calle" sale al encuentro de sus visitantes por doquier, pues éste es precisamente el motivo en el que se inspira la cíclica manifestación llamada Skulptur Projekte Münster, un evento al que son invitados a participar artistas internacionales para analizar la relación entre el arte, el espacio público y el entorno urbano; y a desarrollar trabajos específicos para un lugar concreto.

Muchas de las obras que han formado parte de estas exposiciones en anteriores ediciones siguen en Münster, a las que se añaden otras nuevas en cada edición. El evento se celebra desde 1977 a intervalos de diez años. Y este año toca. Una oportunidad única.


Entre las esculturas -ya clásicas- que permanecen ancladas en las calles y parques en Münster, encontramos el 'banco' de Eduardo Chillida, las 'cerezas' de Thomas Schütte, o las 'bolas' de Claes Olbendurg. Y de entre las nuevas destacamos la obra 'On Water', de Ayse Erkmen, que ha instalado una pasarela formada de contenedores sumergidos bajo el canal Dortmund-Ems, en Kreativkai, el puerto de la ciudad de Münster, y el barrio con más marcha de la ciudad, donde han crecido las terrazas a la vista que ofrece el canal y la posibilidad de caminar sobre las aguas gracias a la operativa ocurrencia del artista, que lugareños y turistas interpretan como algo lúdico... al margen de la filosofía inducida que contenga la acción.

Necesitará por lo menos un par de días para ver la coqueta ciudad y su arte moderno, y recomendamos alquilar una bicicleta. Es la ciudad ideal para pedalear. El anochecer en Münster es hechizante, la iluminación está pensada para que las parejas caminen cogidas de la mano y si la pilla por la plaza que preside la estatua de Kiepenkerl (típico mercader ambulante) ¡mucho mejor! porque es donde se encuentran los más acogedores restaurantes iluminados con velas.

La Documenta

La otra ciudad alemana donde este verano se da cita la élite artística mundial es Kassel, situada en la región de Hesse, en el centro del país.

Lo primero que se encuentra el visitante son las réplicas de la estatua de Hércules, ya que el monumento principal de Kassel es una imponente estatua del héroe mitológico situada en la cumbre de una colina que domina la ciudad. La montaña recibe el nombre de Bergpark Wilhemshöhe, y es un vasto paraje natural idealizado con un acueducto que conduce a un eje de soberbias cascadas y saltos de agua que culminan en el estanque del palacio barroco donde el agua sale disparada a una altura de 50 metros debido a su presión natural. Este espectáculo acuático es especialmente impresionante cuando se ilumina al caer la noche. El parque está abierto todo el año, pero el espectáculo de las fuentes se activa de abril a octubre. El palacio, por cierto, alberga una importante colección de pintura con algunos de los mejores rembrandts.

Kassel es también la ciudad de los Hermanos Grimm, su nuevo museo -Grimmwelt-, es un edificio organizado en dos niveles y dos grandes escalinatas, una obra arquitectónica de gran belleza formal y de obligada visita para los interesados en la arquitectura.

Pero el espectáculo de este verano es la Documenta, la más importante concentración del más rabioso arte contemporáneo que este año también toca, ya que se celebra cada cinco años.

Todo comenzó en 1955, cuando un grupo de artistas se propuso homenajear el arte moderno, particularmente las obras que el nazismo calificó como 'arte degenerado'. Este año se celebra la 14ª Edición, y si bien todas han sido diferentes, la gran muestra colectiva nunca ha perdido su aspecto reivindicativo y denunciador. Este año la temática se centra en el nomadismo y los refugiados como un intento de ver el mundo desde la perspectiva de estos pueblos en conflicto.

'Cráneos de Reno', de Maret Ánne Sara.

La nigeriana Otobong Nkanga vende jabones con polvo de carbón apilados en torres, como si fuera una nueva moneda de cambio; Theo Eshetu presenta su vídeo Atlas Fracturado, en el que se muestran caras extraídas del museo etnográfico pertenecientes a varías tribus y combinando sus rasgos étnicos; la artista finlandesa Máret Ánne Sara denuncia la matanza actual de renos en una suerte de cortina de cráneos con agujeros de bala formando la bandera del pueblo lapón sami; la fotógrafa palestina Ahlam Shibli describe, a través de una estética documental, las implicaciones contradictorias de la noción de hogar de los emigrantes en diversos lugares; la bosnia Irena Haiduk 'vende' mil pares de zapatos cómodos para mujeres que trabajaban de pie; impresiona la video instalación 'The Raft', de Bill Viola, en la que individuos de todos los continentes son anegados por una tromba de agua...

'El Partenón de libros', de Marta Minujín.

Dicen que el arte contemporáneo debe ser explicado con literatura para su comprensión... y en parte es así; pero cuando se coloque delante del 'Partenón de libros', instalación de la argentina Marta Minujín, que consiste en una réplica de las mismas dimensiones que el templo de la Acrópolis griega, pero forrado de libros contra la censura, no exigirá nada más que silencio para sentarse delante y permanecer absorto hasta que reanude la respiración. Cuando el sol pega duro... los libros 'se iluminan' como si fueran mosaicos de gresite. Espectacular.

'Pastillas de Jabón', de Otobong Nkanga.

Y como es de suponer cualquier ciudad (en verano) repleta de arte y artistas, no cierra de noche, y también Kassel tiene su calle de moda, la renovada Friedrich-Ebert-Strasse, donde la vida nocturna sigue... con sus restaurantes ecológicos, biológicos, veganos... y un bar (El Chacal) que los sábados de verano cierra a las cuatro de la mañana ¡Prost!

CÓMO IR

Vuelos directos y diarios Madrid-Frankfurt con Iberia, Lufthansa y Air Europa. Duración: 2,40 horas. Desde Frankfurt varios trenes al día enlazan con Kassel (1,30 horas).

Más información:
Turismo
de Kassel: www.kassel-marketing.de
Para
descubrir la ciudad acompañado por un verdadero connaisseur, se puede poner en contacto con el grupo Kassel Greeter: www.kasselgreeters.de
Turismo
de Münster: www.muenster.de

DOCUMENTA
14: Hasta el 17 de Septiembre de 2017 (www.documenta14.de)
Skulptur
Projekte Münster: Hasta el 1 de Octubre de 2017 (www.skulptur-projecte.de)
Oficina
Nacional Alemana de Turismo: www.germany.travel/es