Hanoi es una ciudad vibrante y bulliciosa. Tan llena de vida que después de unos días allí uno ve hasta normal el continuo ir y venir de gente y de motos que hace que cruzar una calle sea todo un ejercicio de valor para el turista. En esta ciudad donde las motos mandan, la vida en la calle, especialmente en su casco antiguo llamado Old Quarter, proporciona al viajero la oportunidad de conocer de primera mano el modo de vida y las costumbres de este encantador pueblo. Aquí van unas ideas para disfrutar del ambiente callejero de la capital de Vietnam:
Haz compras en sus mercadillos y tiendas
Asia sin sus mercadillos no sería lo mismo y en Vietnam te los encuentras por todas partes. Este del barrio antiguo está abierto de las noches de los fines de semana y es un hervidero de vida. Tampoco olvides echar una ojeada a las calles comerciales del Old Quarter con sus tiendas especializadas: herreros, joyerías, instrumentos musicales, zapaterías o altares y templos budistas.
El paraíso de la comida callejera
La comida callejera en Hanoi es mítica y hay cientos de pequeños locales que sirven su propia especialidad. No son los más limpios, pero estando en Hanoi todo se perdona. Dos recomendaciones que debes probar: el Bun Cha, un plato que es una institución en Hanoi a base de cerdo asado con fideos de arroz y hierbas frescas y el Bun Bo Nam Bo, unos riquísimos tallarines con ternera, hierbas y frutos secos.
Conoce el Mercado de Chợ Äồng Xuân
Los mercados locales son unos excelentes lugares para conocer el modo de vida de un país y el mercado cubierto más grande la ciudad no defrauda. Pasear viendo a los vendedores gritando su mercancía o ancianas haciendo la compra diaria es toda una experiencia, por no hablar de los productos que allí te encuentras, que incluyen desde productos textiles a tortugas y sapos para el consumo humano.
Lago Hoan Kiem
A este bonito lago vienen muy temprano los locales a hacer taichi y el resto del día a pasear e intentar escaparse del ruido y del caos. Algo difícil en esta bulliciosa ciudad. Cruzando el puente Huc llegarás al pequeño templo de Ngoc Son, un remanso de paz entre tanto caos.
La esquina de Bia Hoi
Uno de los placeres de este país es tomar Bia Hoi, la cerveza fresca elaborada a diario sin conservantes ni aditivos y de la que dicen que es la cerveza de barril más barata del mundo. Os aseguro que tomarte una Bia Hoy sentado en un pequeño taburete de esta asombrosa esquina de la calle Hang Dieu es una experiencia inolvidable.
Por Fran Soler, del blog My Guía de Viajes
