
España es una potencia indiscutible en el turismo de sol y playa, pero muchos de sus arenales no están preparados para ser disfrutados por personas con algún tipo de discapacidad. El portal Playea, que el pasado mes de agosto ya presentó un informe sobre las playas adaptadas en España, lanza ahora un ranking de las Comunidades Autónomas más sensibles al reto de hacer accesibles a todos nuestras playas.
De las casi 3.500 playas que hay en España sólo 555 (el 15,9%) son playas adaptadas para personas con distintas discapacidades. Por Comunidades Autónomas las diferencias son notorias. Mientras que en Andalucía casi el 27% de los arenales son accesibles, en Canarias, la proporción baja a menos del 8%. De esta forma, el ranking nacional por CC.AA. queda de la siguiente manera:

Las playas adaptadas no se concentran en las Comunidades con mayor número de arenales. Para Playea esto demuestra que la apuesta por la accesibilidad no es una cuestión de capacidad, sino de concienciación. Por ejemplo, de las 823 playas que tiene Galicia (es la Comunidad con mayor número), sólo 77 son aptas para todos. O lo que es lo mismo, únicamente 9 de cada 100 playas gallegas son accesibles.
Otro punto a destacar es que ni todas las playas son iguales ni todas se gestionan de la misma manera. No es lo mismo un arenal salvaje y de difícil acceso que una playa urbana. La fisonomía influye -subrayan los portavoces de Playea- a la hora de hacer mejoras y adaptar. En este punto Comunidades como Galicia o Canarias salen peor paradas, puesto que muchos de sus arenales son -por sus condiciones naturales- prácticamente inaccesibles.