Las autoridades británicas han dado luz verde a los planes de ampliación del London City Airport. El aeropuerto agrandará un 60% sus instalaciones, resultado de lo cual se incrementará la capacidad aeroportuaria de la capital británica y su entorno.
La noticia llega en pleno debate público sobre la mejor estrategia a medio y largo plazo para aumentar la capacidad aeroportuaria de la capital británica. La ampliación del London City Airport comportará una inversión de 200 millones de libras (260 millones de euros) y permitirá al aeropuerto operar hasta 111.000 vuelos anuales frente a los 70.000 actuales.
Declan Collier, consejero delegado de London City Airport, explica que "el programa de ampliación será completado en 2023, una vez concluida la construcción de siete nuevas plazas de estacionamiento para aviones, una nueva pista de rodaje paralela a la pista de aterrizaje, y dos ampliaciones al lado este y oeste de la terminal". Gracias a la ampliación, el aeropuerto podrá recibir cerca de 6 millones de pasajeros cada año.
Por otra parte, en términos de empleo, se prevé la creación de 1.500 puestos de trabajo, además de otros 500 adicionales durante la construcción de las nuevas instalaciones. El impacto económico del London City Airport se verá asimismo doblado en 2023, alcanzado los 1.500 millones de libras al año (cerca de 2.000 millones de euros).
Dentro de los planes de London City Airport se contempla la mejora de las infraestructuras existentes con el fin de aumentar la capacidad de las pistas, permitiendo un mayor número de despegues y aterrizajes en hora punta. El aeropuerto se abrirá a una nueva generación de aviones más eficientes y silenciosos, lo que permitirá alcanzar destinos de más largo radio que los que actualmente ofrece el aeropuerto. Actualmente, dos tercios de los pasajeros que utilizan London City Airport son viajeros de negocio, pero este porcentaje podría modificarse en un futuro.
