
Después de siete años de preparativos, Brasil celebra este jueves por todo lo alto el pistoletazo de salida del Mundial de Fútbol 2014, que arranca a las 22 h. con el partido que enfrenta a las selecciones de Brasil y Croacia. El país anfitrión ha destinado 25.600 millones de reales (8.434 millones de euros) en recursos humanos y económicos para asegurarse de que este evento deportivo -que se seguirá en todo el mundo- sea todo un éxito. Se estima que 600.000 turistas extranjeros llegarán a Brasil hasta el 13 de julio para seguir en directo el Mundial.
La euforia que desata el espectáculo del fútbol tenderá a disipar las incertidumbres que han acompañado a toda la preparación del Mundial. Brasil ha tenido que acometer importantes obras a contrareloj y hasta ayer mismo una huelga de los trabajadores del Metro de Sao Paulo amenazaba con generar un caos en el día de la inauguración. Pero, finalmente, este paro ha quedado anulado.
Una obsesión: la seguridad
A lo largo de los últimos estos siete años, Brasil ha venido realizando grandes inversiones en seguridad, infraestructuras y turismo, todo ello con las miras puestas en que este gran evento futbolístico cumpla con las expectativas de los aficionados. En el ámbito del turismo se estima que se han generado 200.000 nuevos empleos para atender la demanda de la Copa Mundial. Gracias al evento deportivo se inyectarán 46.784 millones de euros en la economía brasileña entre 2010 y 2014.
Desde el Instituto Brasileño de Turismo (Embratur) aseguran que una de las grandes apuestas del Gobierno brasileño ha sido la seguridad. "La protección de los aficionados está asegurada, ya que el país ha venido poniendo foco en este tema no sólo a través de sus inversiones, que ascienden a 615 millones de euros hasta la fecha, sino también habiendo creado los Centros de Comando y Control Integrados (CICC) a lo largo de sus 12 ciudades sede", explica Vicente Neto, presidente de Embratur.
Estos organismos tendrán la misión de garantizar la seguridad en el país, en la resolución de problemas como el tráfico, el orden público y las emergencias médicas. El plan operacional de seguridad cuenta con 157.000 hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas y fuerzas de la seguridad pública que se distribuirán en las 12 ciudades sede.
Inversiones en aeropuertos y estadios
Brasil quiere que este Mundial de Fútbol tenga un "legado" de infraestructuras para el país. En este sentido, las inversiones han sido muy considerables. Se han destinado 5.798 millones de euros en movilidad urbana abarcando carreteras, puertos, aeropuertos, nuevas estaciones y terminales. Sólo en el aeropuerto Internacional de Río de Janeiro se han invertido alrededor de 115 millones de euros con el fin de ampliar la capacidad de 13 millones a 30,4 millones de pasajeros.
Estadio Nacional de Brasilia. (Foto: Embratur).
En la ciudad carioca, en el Aeródromo de Galeão, se ha estrenado el BRT Transcarioca, un ómnibus que permitirá transportar alrededor de 320.000 personas diariamente desde el aeropuerto pasando por el estadio de Maracaná hasta la Barra Tijuca, salvando una distancia de 39 kilómetros.
En la ciudad de São Paulo, la recién inaugurada Terminal 3 del Aeropuerto de Guarulhos ha ampliado su capacidad hasta llegar a los 42 millones de pasajeros al año. Todo ello para recibir el 25% de los vuelos internacionales durante el Mundial, al tiempo que se consolida como uno de los mayores aeródromos del hemisferio sur.
Otra área la que Brasil ha realizado grandes inversiones ha sido la construcción de las estructuras deportivas, con una inversión que ronda los 2,6 millones de euros. Los estadios han sido construidos siguiendo las directrices que marca el "Sello Verde" (diferencial FSC), bajo premisas de sostenibilidad. Entre estos estadios se encuentra el de la ciudad de Salvador, el Arena Fonte Nova, que será testigo este viernes del debut de España frente a Chile, y que ha recibido el certificado LEED (Leadership in Energy and Environmental Design).