Falta menos de un año para que abra sus puertas la Exposición Internacional de Milán, que tendrá lugar del 1 de mayo al 31 de octubre de 2015. La Expo Milán se ubicará en una de las nuevas zonas de negocio que se está desarrollando en el noroeste de la ciudad italiana. Y también allí, en pleno centro de lo que será el recinto ferial, se encuentra el Barceló Milán, el nuevo hotel de cadena Barceló Hotels & Resorts, al que ya se denomina como "el hotel de la Expo".
El Barceló Milán, un cuatro estrellas superior, se inauguró oficialmente ayer, con una recepción a la que acudieron representantes italianos del mundo de la política, la economía, el turismo y la comunicación. Junto a algunos de los principales directivos de la cadena hotelera española -entre ellos, Raúl González, consejero delegado-, los invitados pudieron conocer el espectacular hotel, de 22 plantas y 280 habitaciones.
El nuevo establecimiento es obra del famoso arquitecto y diseñador de interiores italiano Simone Micheli, considerado uno de los cinco mejores de Italia. Entre las características más llamativas de hotel destaca su carácter ecológico, que encaja de plano con el lema bajo el que se organiza la Exposición Universal, 'Alimentar el planeta, la energía para la vida'. En línea con esta filosofía de respeto medioambiental, Micheli ha introducido en el diseño del hotel avanzados sistemas bioenergéticos que convierten al Barceló Milán en un referente del turismo sostenible.
De este modo, el hotel optimiza su consumo energético, adaptando la producción de energía térmica y del aire frío para la cimatización a las necesidades reales en cada momento, y al empleo de modernos sistemas de gestión que controlan de forma automática los aires acondicionados y las luces en función de si las habitaciones están ocupadas o no. Además, utilizas tecnologías de última generación como la iluminación LED y distintas fuentes de energías renovables, como una planta que genera calor gracias al intercambio de fluidos, la producción de agua caliente sanitaria mediante la recuperación del calor de la condensación, la recuperación del calor del aire expulsado al exterior y del agua de lluvia y la implantación de placas solares y fotovoltaicas.
Otra de las señas de identidad del hotel y de su estilo vanguardista es la apuesta por las formas ergonómicas que imitan a la naturaleza. La idea es crear una sensación de paz y armonía, compatible con un ambiente cool. Un ejemplo de todo ello es el pequeño bosque de abedules deshidratados en el interior de uno de los dos restaurantes del hotel, donde -por cierto- se sirve exquisita cocina italiana.
El hotel se encuentra ya abierto al público y las reservas por noche tienen una tarifa desde los 207 euros, en habitación doble con desayuno.
