
La Misión Arqueológica Española del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto ha realizado un hallazgo histórico, la primera evidencia de la corregencia de Amen-Hotep III y su hijo Amen-Hotep IV, conocido como Akhenaton. El descubrimiento tendrá, a priori, una enorme trascendencia para la egiptología, afectando a cuestiones como la instauración del monoteísmo en Egipto, el legado de la Dinastía XVIII, la paternidad del faraón Tutankamón o las relaciones entre la familia real y el clero del dios Amón.
El hallazgo ha sido presentado en Madrid, en la sede del Instituto de Estudios del Antiguo Egipto, por el director de la Misión Arqueológica, el Dr. Francisco Martín, en presencia del consejero de Cultura del Instituto, Elsayed Soheim, y del agregado de Turismo de Egipto en España, Mohamed Mohsen Ismael. Martín ha proclamado que "habrá que reescribir la historia de la Dinastía XVIII". El arqueólogo argumenta que este hallazgo pone fin a divisiones históricas entre los especialistas en egiptología de todo el mundo que debatían sobre la existencia o no de la corregencia en una etapa fundamental de la historia de Egipto, la que determinó el tránsito del politeísmo al monoteísmo. "Esto modifica lo que se dice en centenares de libros considerados intocables hasta la fecha", reitera el arqueólogo español.
El Dr. Martín, Elsayed Soheim y Mohamed Mohsen Ismael durante la presentación del hallazgo.
El descubrimiento
Aunque lo hemos conocido oficialmente ahora, el descubrimiento de los arqueólogos españoles se produjo el 4 de noviembre de 2013. En esa fecha, tras la excavación de la tumba Asasif nº28, perteneciente al Visir Amen-Hotep Huy, se localizaron unas inscripciones con los nombres de los dos reyes -padre e hijo- coronados al mismo tiempo como soberanos e hijos de Ra, confirmando así la corregencia. Estas inscripciones, datadas en el año 30 del reinado de Amen-Hotep III, se hallaban sobre el fuste de varias columnas de la capilla excavada en la tumba del Visir, la más grande de la necrópolis de Tebas.
La datación permite acortar en al menos 10 años la cronología de la decimonovena dinastía, periodo durante el cual se habría alargado la corregencia. "Ambos reyes pudieron gestar la revolución monoteísta y tomar parte del mito que se desarrolló a continuación", sentencia el Dr. Martín. Desde el pasado noviembre hasta la fecha, el Ministerio de Antigüedades ha sometido el hallazgo al análisis de expertos egiptólogos para contrastar su veracidad antes de proceder a su divulgación.
Trabajos en el interior de la capilla de la tumba del Visir. (Fot.: Instituto de Estudios del Antiguo Egipto).
No obstante las cautelas, hecho el anuncio queda por delante un largo trabajo antes de que la tumba del Visir pueda ser visitada por el público, es decir, antes de que sea accesible al turismo. El director de la Misión Arqueológica explica que el objetivo es "la puesta en valor del monumento", lo que en primera instancia supone "sacarlo de la ruina", una tarea ocupará tres o cuatro años. Hay que tener en cuenta que la tumba del Visir fue, en su día, deliberadamente atacada "a golpe de cincel" para eliminar su memoria, destrozando nombres e inscripciones que ahora deberán ser minuciosamente recompuestos. "Un puzzle de 7.000 piezas", expresa el Dr. Martín.
La situación en Egipto
Preguntado por si la transformación sociopolítica que está atravesando Egipto ha influido en el trabajo de los arqueólogos, el Dr. Martín insiste en que "no ha habido problemas", que incluso han percibido "cierto apoyo mayor por parte de las autoridades para continuar con nuestro trabajo". La prueba evidente de la falta de incidentes es que ha sido posible el descubrimiento en la tumba del Visir. La Misión Arqueológica Española comenzó a trabajar en la zona hace 14 años y su director recalca que la presencia del equipo ha sido continua, "antes, durante y después de la revolución". No obstante, admite que en otras zonas sí ha habido investigaciones arqueológicas que, por precaución, han frenado su actividad.
"Vicisitudes de cambios existen en todos los países y eso no significa que se deje de ir", afirma el arqueólogo en relación a la caída del turismo. Desde su percepción como alguien que realiza continuos viajes y estancias en el país, el Dr. Martín no duda en invitar a los turistas a que vuelvan a Egipto y reitera que el pueblo egipcio "está deseoso" de acogerles de nuevo. "La gente no tiene motivos para no ir a Egipto más allá de los suyos propios económicos", insiste el arqueólogo, firmemente convencido de que "a Egipto se debe ir por lo menos una vez en la vida".