
Japón
El País del Sol Naciente abre su alma secular a los visitantes, que quedan embrujados por la magia de su tradición y el Zen de su espíritu. Japón es un país de máximos contrastes: desde la armonía y el equilibrio propios de su tradición ancestral al bullicio y la innovación tecnológica de sus ciudades. Conocer esta cultura tan radicalmente diferente de la nuestra hace que este viaje marque una línea vital en el viajero, un antes y un después.
Polinesia Francesa
Las 118 islas de la Polinesia Francesa se extienden sobre el Pacífico en una superficie similar a la que ocupa el continente europeo. La mayoría no son islas entendidas tal y como estamos acostumbrados, sino anillos de tierra -formados por montañas elevadísimas o delicadas superficies arenosas- que circundan un mar de un azul indescriptible. La rejuvenecida aerolínea Air Tahiti Nui es la mejor opción para ir a las paradisíacas Tahití, Bora Bora, Moorea...
Islas Cook
Quince islas se diseminan en alrededor de dos millones de kilómetros cuadrados, ubicadas en el centro del triángulo polinesio. Pueblo orgulloso, de una rica cultura, ofrece a los visitantes cálidas bienvenidas para sumergirlos en sus costumbres y cultura. Lugar idóneo para descansar por el suave ritmo de vida, que permite un relax absoluto para recorrer las islas, envueltas en una naturaleza que deslumbra la mirada.
Australia
La experiencia de conducir por las interminables carreteras australianas es algo que no se olvida. En el país aussie el sol parece brillar más y el aire ser más puro. El deseo de aventura también es otro de los ingredientes que este inmenso país tiene para llamar la atención de los más intrépidos viajeros de todo el mundo. Ésta se mezcla con la modernidad de ciudades como Sydney, Melbourne o Brisbane, así como con la impresionante isla de Tasmania.
Nueva Zelanda
El país de los maoríes lleva años recibiendo a los millones de enamorados de "El señor de los anillos", deseosos de recorrer la que se ha venido a llamar "La ruta del hobbit". Pero no sólo de cine vive Nueva Zelanda, que sigue asombrando a los visitantes con sus espectaculares geysers, con ciudades como Auckland o con su verdor sobrecogedor. Además, muchos españoles realizan un ritual curioso: enterrar la mitad de un recuerdo en un punto del país y, mediante una web que calcula la posición, enterrar la segunda mitad en un lugar concreto de la meseta central española: exactamente, en la otra parte del mundo.