Los datos de mayo, del INE, relativos a pernoctaciones en alojamientos rurales han dado una alegría a Castilla-La Mancha. La Comunidad Autónoma ha adelantado a Extremadura en el ranking nacional de interior y se ha situado como el cuarto destino más demandado por detrás de Castilla y León, Baleares y Cataluña.
Durante el mes de mayo, Castilla-La Mancha acaparó el 7% del total de las pernoctaciones, en términos absolutos 24.048. La inmensa mayoría de estas pernoctaciones en alojamientos rurales fueron realizadas por viajeros españoles o residentes en España (22.480), mientras que la demanda internacional supuso una minoría (1.568 pernoctaciones). La estancia media en este tipo de alojamiento se situó en 2,13 días.
Con estas cifras, Castilla-La Mancha desbanca a Extremadura, que se quedó en 20.127 pernoctaciones. Por su parte, Castilla y León mantuvo el liderazgo con 88.995 pernoctaciones, seguida por Baleares, con 82.136, y Cataluña, con 47.029.
La consejera de Empleo y Economía de Castilla-La Mancha, Carmen Casero, ha valorado positivamente este comportamiento y ha afirmado que "los datos conocidos en cuanto a pernoctaciones posicionan a Castilla-La Mancha como un referente en turismo rural".
La consejera ha precisado que "las cifras de alojamiento de turismo rural muestran cómo Castilla-La Mancha puede ofrecer una variada oferta de calidad con productos adaptados a las necesidades actuales, como es el turismo de naturaleza o el de aventura". Asimismo, ha destacado que las cifras de mayo no sólo hayan mejorado los registros del mismo mes del pasado año, sino los del mes de abril de éste.
Por último, Casero ha hecho hincapié en la necesidad de "perseverar aún más para mejorar nuestros indicadores turísticos" y ha hecho referencia al Plan de Inversión y Creación de Empleo actualmente en curso, que considera el turismo como uno de sus ejes básicos. Este sector supone el 12% del PIB regional y da empleo a 42.000 personas en Castilla-La Mancha.