
El Consejo de Ministros celebrado el pasado viernes 23 aprobó la supresión de la Secretaría de Estado de Turismo, que volverá a tener el rango -inferior- de Secretaría General de Turismo al frente de la cual se mantendrá Joan Mesquida, hasta ahora secretario de Estado de Turismo.
La medida forma parte de la política de ahorro y austeridad impulsada por el Gobierno y que ha supuesto la desaparición simultáneamente de varias secretarías de Estado más, secretarías generales y direcciones generales. En total, el Gobierno ha recortado nueve altos cargos que se suman a los 33 que ya suprimió el pasado mes de abril.
Tanto la oposición como el sector empresarial turístico han acogido muy negativamente la noticia, especialmente en la actual coyuntura económica. La portavoz de Turismo del PP en el Congreso, María Salom, ha criticado la decisión de relegar a la segunda industria del país en lugar de haber valorado otras alternativas para contener el gasto público.
Por su parte, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) ha emitido un comunicado en el que declara "no entender" la supresión de la Secretaría de Estado de Turismo propuesta por el ministro Miguel Sebastián, puesto que "refleja una indudable rebaja de rango para el sector dentro las prioridades del gobierno."
Asimismo, los hoteleros advierten que la degradación jerárquica del turismo abre "numerosas incógnitas en referencia al futuro de los proyectos e iniciativas que se estaban trabajando conjuntamente con la Secretaría de Estado de Turismo."
Medidas "paliativas"
Sin embargo, desde el Ejecutivo se ha insistido en "el compromiso" con el turismo, un sector cuya aportación al PIB supera los 100.000 millones de euros y que compensa el déficit de la balanza de pagos en más del 40%. Estas cifras, que dibujan la magnitud de la industria turística, no han logrado evitar la supresión de la Secretaría de Estado.
Quizás para apuntalar ese "compromiso" declarado, el mismo Consejo de Ministros que ha eliminado la Secretaría de Estado ha aprobado un paquete de medidas a favor del turismo con una financiación de 250 millones de euros.
Estas medidas se orientan a la modernización de las infraestructuras turísticas y a la promoción internacional de España como destino turístico, haciendo especial hincapié en la nueva estrategia del marketing deportivo. La medida más significativa dentro de este paquete es la nueva regulación del Fondo Financiero del Estado para la Modernización de las Infraestructuras Turísticas (FOMIT), cuyo importe en este año asciende a 200 millones de euros.
Las ayudas, que se concederán a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), ofrecerán un tipo de interés fijo del 0,50% y serán reembolsables en el plazo máximo de 15 años, con un periodo de carencia de cinco. El límite de las inversiones será de seis millones de euros y un mínimo de 300.000 euros por beneficiario y año cuando se trate de entidades locales o entes dependientes de las mismas, y hasta 25 millones para los consorcios o entidades constituidas para realizar programas de recualificación de destinos turísticos maduros.
Balance de una etapa
Coincidiendo con la supresión de la Secretaría de Estado de Turismo, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio ha presentado un informe sobre el grado de cumplimiento de los planes y actuaciones trazados en el Consejo de Ministros monográfico de turismo celebrado el 24 de julio del pasado año.
En aquel Consejo de Ministros se comprometieron inversiones por importe de más de 1.000 millones de euros concretadas en 38 actuaciones que implicaban a 12 ministerios. En el año transcurrido la práctica totalidad de los acuerdos adoptados se han cumplido o están en fase de ejecución.
Entre estas actuaciones cabe destacar la puesta en marcha del Plan FuturE que ha destinado a la renovación de infraestructuras turísticas 500 millones de euros, de los que se adjudicaron 393 millones de euros, generando una inversión inducida de 726 millones de euros. Este Plan se ha relanzado en 2010 con una financiación de 400 millones de euros, de los que hasta el momento se han concedido 315 millones de euros que se han traducido en una inversión próxima a los 630 millones de euros.