
El turismo puede ocupar un lugar destacado en la lucha contra el cambio climático si se movilizan plenamente los recursos y la capacidad de innovación de este sector económico mundial de importancia capital. Esta es la tesis defendida desde el mundo académico tras la Conferencia Internacional del Cambio Climático COP21 celebrada días atrás en París.
El acuerdo aprobado por los grandes líderes políticos se marca como gran objetivo evitar que la temperatura mundial aumente más de dos grados en este siglo y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. En sintonía con dicho acuerdo, la nueva Carta Mundial de Turismo Sostenible 2015 recoge el compromiso del turismo contra el cambio climático. Dicha Carta fue aprobada en la reciente Cumbre Mundial del Turismo Sostenible TS+20, que se celebró los días 26 y 27 de noviembre en Vitoria-Gasteiz.
Innovación y eficiencia energética
La industria del turismo y de los viajes se enfrenta al desafío de incorporarse al liderazgo del movimiento mundial en favor de una economía baja en carbono. El carácter multifuncional y transversal de la actividad turística permite desarrollar un extraordinario abanico de iniciativas de mitigación del cambio climático, en particular en sectores críticos como la energía, el transporte, el alojamiento o la provisión de agua.
Jordi Ficapal, director del Observatorio de Turismo Responsable (OTR) de la Facultad de Turismo y Dirección Hotelera Sant Ignasi- HTSI (Universidad Ramon Llull),valora positivamente el acuerdo de París. En su opinión, "la eficiencia energética y el recurso masivo a las energías renovables aportan innumerables beneficios en términos de competitividad económica y sostenibilidad, además de la reducción de los riesgos derivados de dependencia del carbono y la erradicación de la desigualdad energética en los destinos".
En este sentido en la nueva Carta mundial de Turismo Sostenible de Vitoria-Gasteiz 2015 se recoge el compromiso del turismo frente al cambio climático, declarando que "el turismo debe responder de forma activa y de manera urgente al cambio climático reduciendo prgresivamente sus emisiones de gases de efecto Invernadero". También se hace un llamamiento a la acción de los Gobiernos, organizaciones internacionales, destinos y comunidades locales, industria turística, consumidores, investigadores y formadores y ONG's para integrar la sostenibilidad en sus políticas y estratègies.
La cumbre de Vitoria dedicó importantes esfuerzos a reflexionar colectivamente sobre el papel del turismo ante el cambio climático dado que es una industria intensiva en energia. El transporte hacia los destinos y la movilidad en los espacios turísticos constituyen el primer responsable de las emisiones en el conjunto de las operaciones turísticas.
Lo cierto es que el cambio climático afectará a los destinos turísticos, a su competitividad y a su sostenibilidad en multitud de aspectos. Puede alterar directamente recursos ambientales que son destacados atractivos turísticos, o indirectamente a través de la pérdida de biodiversidad, escasez de recursos como el agua o por los gravámenes derivados de las políticas de mitigación.
Estamos a tiempo
Pero hoy en día esta tendencia puede alterarse radicalmente, apuntan desde la Universidad Ramon Llull. El centro universitario defiende que una actividad turística que contemple la eficiencia energética y el uso de las energías renovables, no sólo es viable tecnológicamente, sino que aporta numerosas ventajas. "La apuesta por sistemas de transporte de bajas emisiones y modos basados en la movilidad sostenible abre la puerta a un nuevo compromiso del turismo con la sostenibilidad y aporta originales atractivos en los destinos para la práctica del turismo responsable", concluye.