
El Ministerio de Fomento dejará de tomar muchas de sus decisiones por intuición, hasta ahora fundamentadas en encuestas, para hacerlo con datos perfectamente objetivos y precisos. Esta modernización en los criterios afectará a la mayor parte de las obras públicas y para ello se ayudará de las técnicas del Big Data, en este caso contratadas a Orange a través del preceptivo concurso públicos.
Es decir, en lugar de promover sondeos entre los futuros usuarios de las infraestructuras, más o menos a ojímetro, el departamento que dirige Íñigo de la Serna aprovechará el aluvión de datos que generan cada segundo los ciudadanos a través de sus teléfonos móviles para conocer las necesidades reales de los futuros beneficiarios de las carreteras, puentes, estaciones de tren o aeropuertos, por ejemplo.
Con ese objetivo, Fomento ha elegido la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Orange y la consultora Kineo para la realización de estudios de movilidad interprovincial en todo el país. De esa forma, Fomento podrá fundamentar la viabilidad de sus futuros proyectos de transporte de personas con datos reales, todos ellos extraídos de la información que continuamente recopila el operador de telecomunicaciones. En todo caso, Orange y Kineo manejan datos anónimos, agregados y extraprolados de los usuarios de las líneas, sin que en ningún caso se desvele la identidad de sus clientes. Según explica José Antonio Serrano, responsable de Wholesale y nuevos servicios de Orange España, "la administración pública se ha convertido en un early adopter (pionero tecnológico) con la ayuda de las técnicas del Big Data con la idea de matar la intuición". Es decir, lo que antes se hacía con encuestas se hará con la ayuda de los algoritmos, no basados en opiniones sino en hecho reales. Además, el nuevo procedimiento de actuación ofrece otras ventajas respecto al método tradicional de los sondeos: es mucho más eficaz, barato, fiable y rápido, según explican las mismas fuentes a elEconomista.
Métodos predictivos
"La administración se aprovechará de las nuevas formas de obtención de conocimiento sobre movilidad que surge de la rápida evolución de las tecnologías de la información", añaden fuentes del operador de telefonía.
El contrato ganado por Orange y Kineo apenas alcanza los 159.000 euros, importe suficiente para poner en marcha una iniciativa que podría ser replicado en otros departamentos de la administración central. A grandes rasgos, Orange España comenzará a monetizar un tipo de información que hasta el momento no se ponía en valor, con la que no se hacía nada salvo para los requerimientos propios de seguridad a los que está obligado el sector de las telecomunicaciones.
Trazabilidad de las personas
Orange y Kineo utilizarán como fuente principal los datos anonimizados que "generan las antenas de telefonía móvil, por el uso de los dispositivos móviles y que permiten, junto con la utilización de otras apps o servicios, el geoposicionamiento de los terminales móviles y el itinerario recorrido por éstos en cada momento y circunstancia". En este caso concreto, los adjudicatarios del contrato público estudiarán la movilidad interprovincial de los viajeros en el territorio español en cada uno de los cuatro modos de transporte: carretera, ferrocarril, marítimo y aéreo.
A modo de ejemplo, Fomento podrá añadir o suprimir estaciones de ferrocarril en las líneas actuales en función del uso real de las mismas. Asimismo, puede reforzar el servicio en determinadas horas y rebajarlo en otras, optimizando los recursos. Con este tipo de técnicas, el Ministerio de Fomento tendrá las mejores herramientas para evitar la existencia de autopistas de peaje fantasmas sin apenas uso, con cuantiosas inversiones malogradas.
Necesidades reales
Con los datos de geoposionamiento de los móviles también se puede averiguar en tiempo real que medios e infraestructuras utilizan los ciudadanos para resolver sus necesidades cotidianas de transporte. "La foto que se realiza de los hábitos de los españoles permite tomar decisiones eficaces siempre en función de modelos predictivos basados sobre datos reales", añade Serrano.
"Los resultados del estudio de movilidad, que se realizará en cuatro meses, harán referencia a la totalidad de la población mediante la correspondiente extrapolación de la muestra (usuarios de dispositivos móviles que son usuarios de la red de telefonía móvil de Orange y sus segundas marcas) garantizando así unos resultados mucho más acordes a la realidad de la población del país que los que se podían obtener solo a partir de encuestas", añaden las mismas fuentes.