Para los usuarios, la introducción de nuevas tecnologías les ayudará a mejorar la calidad de sus desplazamientos. Para las empresas, supondrá un ahorro de costes y de energía
El aterrizaje de las nuevas tecnologías en la vida real ya es un hecho. Su aplicación a los diferentes sectores puede ayudar a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, así como la de las infraestructuras existentes. En este sentido, la llegada de la digitalización al negocio del transporte implicará una importante bajada de precios a los clientes y un gran ahorro de costes a las empresas, que verán cómo pueden ofrecer nuevos servicios que hace años ni se planteaban, así como tener acceso a información en tiempo real que les permita ahorrar en el consumo de energía o mejorar determinadas conexiones.
A esta y otras conclusiones llegaron los expertos en el Observatorio organizado por elEconomista y Siemens sobre La movilidad en la era digital: ventajas y retos en el que debatieron las ventajas y los desafíos que enfrenta el sector del transporte con el creciente proceso de digitalización. En este encuentro, celebrado el pasado martes 15 de septiembre, acudieron el gerente de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, Alberto García Álvarez; el director adjunto del Laboratorio de Interoperabilidad Ferroviaria del Cedex, Jorge Iglesias Díaz; el subdirector de Tecnologías de la Información y la Comunicación, Ignacio Martínez; el director de Estrategia de Mobility de Siemens, Enrique Torres; el subdirector de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Adif, Andrés Cortabitarte; y el responsable de Ventas Mobility de Siemens, Leopoldo Olea.
Uno de los puntos que fue tratado de forma más amplia por dichos expertos fue el relativo a las mejoras para los ciudadanos. Por un lado, destacaron el factor de los precios. Así, en palabras de Alberto García Álvarez, "hay mayor información sobre los precios, lo que ha producido una variación de ofertas y da lugar una mayor satisfacción por parte de la sociedad. El reto va a ser ahora adecuar la oferta a la demanda para maximizar la rentabilidad".
Esta opinión también fue compartida por Leopoldo Olea, que apuntó que con la digitalización se va a producir un fenómeno "de bajada generalizada de los precios".
Pero ésta no es la única ventaja de la que van a poder disfrutar los ciudadanos. La oportunidad de recibir datos en tiempo real repercute a su vez en que los viajeros pueden recibir información directa que conllevará una mejora en la calidad de sus viajes.
Mejora en la calidad de vida
Y es que este fenómeno no sólo va a llegar a transportes como trenes u aviones, también se va a materializar en el día a día de todos los ciudadanos. En esta línea, la modernización tecnológica de los sistemas de transporte podrá ayudar a reducir los atascos o que, al menos, sepamos por qué zonas podemos evitarlos.
Enrique Torres destacó un dato curioso: los atascos suponen un gasto de 100.000 millones al año en Europa. "Con la digitalización, podríamos optimizar nuestros recursos", añadió. De hecho, el director de Estrategia y Mobility de Siemens hizo especial hincapié en los métodos para que los ciudadanos puedan tener un mayor confort en su día a día. "Hay que tratar la mejora de la experiencia de los pasajeros integrando un servicio lo más amplio y variado posible: desde conocer el estado del tráfico en tiempo real o saber si van a conseguir aparcamiento en la zona donde quieren ir".
Además, la digitalización también es una herramienta importante que facilitará mucho la vida de personas con movilidad reducida, ya que les permitirá conocer de antemano los servicios de los que disponen si van a determinada estación, o van a realizar determinado viaje. También, afectará a las personas con determinados tipos de intolerancias u alergias alimentarias, ya que podrán tener un menú adecuado a sus necesidades preparado de antemano.
Ahorro energético
Pero esta modernización no sólo va a repercutir en el ciudadano de a pie, sino que va a suponer un importante ahorro para las empresas que viven del negocio de los transportes. Torres puso de ejemplo, en esta misma línea, que hay un reto importante con la digitalización de ciertos procesos. Sin ir más lejos, aclaró que la conducción automática es más eficiente que la que realiza un conductor. Para los escépticos, la mayoría de los expertos coincidieron en que la digitalización conllevará un aumento de la seguridad en casi todos los ámbitos de este negocio.
Al hilo de esto, Andrés Cortabitarte, puso como ejemplo que en el año 1980 se produjeron 1.701 accidentes, cuando la plantilla era mucho más amplia que ahora y la digitalización de determinados procesos ni se planteaba entre los principales responsables del sector. Frente a esto, el número de accidentes en el pasado año fue de 49 -de hecho, todos menos uno fueron provocados por causas externas a los sistemas informáticos-. En otras palabras, gracias a la digitalización se han reducido en más de un 97 por ciento los accidentes. De hecho, adelantó que conforme las nuevas tecnologías se vayan implantando, los fallos de seguridad irán disminuyendo.
Por otro lado, el ahorro también llegará al campo del mantenimiento de los vehículos y las instalaciones. "Ahora se pueden recopilar los datos en tiempo real para saber qué infraestructuras debes mejorar y saber en qué momento puedes realizarlo gracias al almacenamiento de datos", explicó el subdirector de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Adif. "No obstante, todavía queda un largo camino por recorrer respecto a la toma de decisiones digitalmente", añadió Cortabitarte.
Nuevos retos
Sin embargo, no todo lo que conlleva la digitalización es positivo y, en muchos casos, puede conllevar diferentes desafíos para el sector de los transportes derivados del cambio de modelo de negocio. En este sentido, los expertos señalaron el problema al que se enfrentan con el fenómeno de la economía colaborativa o de la integración de servicios.
Respecto al último punto, Alberto García Álvarez destacó que cada vez habrá más empresas que integren tus diferentes viajes, lo que "va a chocar mucho con cómo defines la oferta, son otros agentes diferentes a los que hemos conocido hasta el momento. Esto va a requerir una ecuación distinta de los sistemas de transporte". Sin embargo, los expertos también apuntaron que hay un problema regulatorio derivado de que cada tipo de transporte está sujeto a una legislación específica. El gerente de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles explicó que esto "dificulta mucho la regulación tarifaria, tiene que haber una complementariedad en las formas de transporte, ya que esto podría ayudar mucho a los usuarios. Además, todos apuntaron a que el billete único "tiene que llegar" en el corto plazo y la liberalización plena tiene que hacer que haya mejores servicios y los ciudadanos tengan mejores prestaciones.
En el caso de la economía colaborativa, Ignacio Martínez habló de un fenómeno que le llamó mucho la atención en su último viaje a México. La población utiliza más los servicios de la aplicación Uber -y los considera más seguros, ya que puedes disponer de la matrícula del vehículo, de opiniones de los clientes anteriores- que los de un taxi como tal, por no hablar del transporte público, que no es uno de los medios que transmita más confianza en el país azteca.
Negocios a mejorar
No obstante, las nuevas tecnologías también ayudarán a mejorar determinados negocios en los que España se ha quedado un poco obsoleta y que los expertos coinciden en que tenemos mucho potencial.
En primer lugar, todos se mostraron muy partidarios de que la modernización llegue al negocio del transporte de mercancías. El responsable de Adif señaló que "mientras que en otros países europeos se transporta el triple que en España -en Europa del Este llega al 50 por ciento-, en nuestro país la cifra apenas alcanza el 4 por ciento". En este sentido, destacaron que el mercado de mercancías por ferrocarril está muy limitado (toneladas, longitud de los trenes, velocidades comerciales). "Si de alguna forma cierto tipo de redes se limitaran sólo al transporte de mercancías, creo que este mercado podría mejorar en España", explicó Cortabitarte.
Por su parte, Torres aclaró que en los últimos tiempos se están haciendo inversiones muy importantes en cuanto a puertos para que se pueda desarrollar mejor el transporte de las mercancías. "En España todavía estamos a años luz del resto de Europa, pero no podemos no mirar el caso del transporte por carretera, es sólo cuestión de tiempo que en Europa haya un sistema tecnológico común que ayude a gestionar de manera eficiente el negocio de las mercancías", añadió el responsable de Siemens.