La Orden Ministerial que dará el pistoletazo de salida a la liberalización del Corredor ferroviario entre Madrid y Levante no incluye ni menciona un posible calendario para ir abriendo paulatinamente otros ejes como el AVE Madrid-Barcelona o la alta velocidad entre Madrid y Sevilla. Así lo confirman a elEconomista fuentes solventes conocedoras del contenido de la normativa que podría ser publicada en el BOE antes de que finalice esta semana (hoy jueves, mañana viernes o el próximo sábado).
Ello supone descartar por completo en esta legislatura la posibilidad de que se abran a la competencia privada estos corredores, condición que habían exigido los operadores privados interesados en el proceso para poder elaborar un plan empresarial coherente y rentable en el caso de que pudieran operar varios ejes ferroviarios al aprovechar las economías de escala.
Desde el Ministerio de Fomento no se quiere oír hablar de nuevas aventuras hasta que no se adjudique el AVE de Levante y se compruebe, sobre el terreno, si se rentabiliza su inversión y si la apertura supone un beneficio para el pasajero, que tendría una mayor variedad de horarios y, casi con toda seguridad, una bajada de precios en el billete por la competencia.
Ahora la duda es conocer cuantos candidatos privados van a concursar finalmente en estas condiciones. Como publicó este periódico, las empresas que podrían participar en el proceso ya han realizado sus cálculos y acumularían unas pérdidas operativas de hasta 80 millones de euros en los siete años que dura la explotación. Uno de los lastres sería el canon que les cobraría Adif, que puede llegar a representar más del 60 por ciento de los costes del operador privado que se presente.
No hace caso a la CNMC
Con esta decisión, el Ministerio de Fomento no hace caso a la recomendación de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que en un informe referido a la liberalización ferroviaria aconseja al departamento dirigido por Ana Pastor que liberalice los trayectos más rentables (como son los casos del Madrid-Sevilla o del Madrid-Barcelona) para "garantizar una mayor seguridad jurídica a los operadores".
Antes del verano, varios de los principales candidatos a pujar en el concurso (Acciona, Globalia y Veloi Rail) estaban preparando un documento para exponer su punto de vista al Ministerio de Fomento y solicitaron una reunión con el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, en ese momento.
Después del verano, todo ha cambiado. Catalá ha tenido que sustituir a Alberto Ruiz Gallardón como ministro de Justicia y el puesto del primero ha sido ocupado por Julio Gómez Pomar, hasta entonces, presidente de Renfe.
De esta manera, el número uno del máximo rival de los operadores privados en el Corredor del Levante ha pasado a ser de la noche a la mañana el máximo responsable de la empresa rival con la que se batirá el cobre el ganador del concurso, a dirigir y supervisar el proceso como número dos de Fomento.
Durante la presidencia de Renfe por parte de Julio Gómez Pomar, el operador público ha puesto en marcha dos agresivas campañas de descuentos en el precio del billete para captar el mayor número posible de viajeros. Ambas promociones han tenido un gran éxito.
Crecimiento a doble dígito del AVE