
La consejera de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad de Madrid, Rocío Albert, ha confirmado la intención del gobierno regional de incrementar las tarifas del transporte público con el objetivo de destinar lo recaudado a nuevas inversiones. La responsable de las cuentas madrileñas aseguró que "lo que no se puede es hacer imposibles" y reclamó llevar a cabo una revisión al alza del marco tarifario para mantener "el nivel de inversión" en Metro de Madrid.
Albert, que no ha puesto fecha a esta subida de tarifas, ha indicado que hay que seguir ayudando a los que "realmente lo necesitan", pero "a lo mejor parte de la subvención que fue como consecuencia de la pandemia debe revertirse y debe utilizarse para esas inversiones", ha expresado en un desayuno informativo de Europa Press y cuyas declaraciones ha recogido la propia agencia.
Las actuales tarifas del transporte público madrileño llevan bonificadas desde finales de 2022, cuando el Gobierno decidió subvencionar el 30% de los abonos recurrentes como forma de hacer frente a la inflación, siempre que las autonomías se hicieran cargo del 20% restante hasta llegar a un descuento del 50%. Madrid fue más allá y decidió incrementar esta bonificación en un 10% adicional, hasta llegar al 60%.
Pero la aceptación de esta subvención estatal por parte de la administración regional conllevaba la obligación de mantener las bonificaciones durante todo el año 2024, algo que, a priori, deberá respetar la Comunidad de Madrid. Esto trasladaría la subida de tarifas al próximo año 2025, momento en que también parece que podría entrar en vigor la anunciada revisión del mapa tarifario que simplifique los precios en dos únicas coronas: A, para el término municipal de Madrid, y B, para el resto de municipios de la Comunidad.
Faltan 3.500 millones para trenes y obras
La Comunidad de Madrid tiene un problema con la financiación de su transporte público al mismo tiempo que sigue haciendo bandera de las rebajas de impuestos. A lo largo de sus tres legislaturas, Isabel Díaz Ayuso se ha topado con la necesidad de acometer ampliaciones de la red tras una década de parálisis inversora, pero no encuentra los fondos con los que acometerlos y está recurriendo a fondos europeos y préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI) para financiar estas actuaciones, cuyo coste supera los 3.500 millones de euros.
Los planes de ampliación de Metro de Madrid contemplan la extensión de la línea 3 hasta El Casar (Getafe) a cambio de 110 millones; la de la línea 5 hasta Aeropuerto T1-T2-T3 por 209 millones; la creación de una nueva estación en la línea 9 para dar servicio a Los Berrocales y Los Ahijones, aún sin presupuesto; la ampliación de la estación de Santiago Bernabéu (L10) por 60 millones y otra posible estación junto a este estadio en la línea 8 por otros 60, todavía por concretar.
A todo ello hay que sumar su proyecto estrella, la extensión de la línea 11 de Metro, que a falta de definir la mitad de su trazado ya ronda los 1.000 millones de euros. Sólo la primera fase entre Plaza Elíptica y Conde de Casal tiene un coste de 372 millones. A ello hay que sumar la ampliación por el sur, entre La Fortuna y Cuatro Vientos, cuyo coste será cuantificado en el proyecto de ampliación adjudicado esta misma semana. Más al norte, el tramo central entre Conde de Casal y Mar de Cristal sigue sin estar definido; mientras que el tramo hasta Valdebebas elevará la factura en otros 600 millones para ejecutar las 8 estaciones previstas en este nuevo barrio.
Al mismo tiempo, el material movil de Metro de Madrid ha ido envejeciendo hasta el punto de superar su vida útil. Por esta razón, el Ejecutivo regional tendrá que hacer frente a una factura de 1.028 millones de euros para comprar nuevos trenes para las líneas 1 y 6, principalmente, que serán financiados en 820 millones por el BEI y el ICO. Además, ha tenido que hacer frente al fin de los contratos de leasing que vinculaban a más de 140 trenes, y que han obligado a la Comunidad a desembolsar 367 millones entre 2022 y 2023, año en que finalizaban los contratos.
El pasado enero, el titular de la cartera de Transportes, Jorge Rodrigo, reclamó al Gobierno central que aumentase la financiación estatal al transporte público madrileño. En concreto, calificó de "claramente insuficientes" los 126 millones aportados por el Estado a las arcas madrileñas, "que representan tan solo el 6% de las necesidades que tiene el Consorcio Regional de Transportes de Madrid" y que lleva "diez años estancada", según el consejero.