El sector de la vivienda turística en Andalucía, como viene sucediendo a nivel internacional, está en pleno crecimiento. La región cuenta actualmente con más de 77.000 alojamientos de esta tipología activos y disponibles todo el año, de los cuales unos 30.500 son apartamentos. La Junta de Andalucía está ultimando los detalles de un nuevo decreto de ordenación de este segmento que genera un impacto económico de 3.600 millones de euros y que da empleo a 17.500 personas de manera directa y a otras 15.000 indirectamente.
"Queremos dar respuesta a la demanda social tanto de las asociaciones vecinales como de las personas usuarias y consumidores que abogan por una regulación que ordene este mercado", explican desde la consejería de Turismo, Cultura y Deporte.
Una normativa, que aún no tiene fecha de publicación ni entrada en vigor, pero que desde la patronal han acogido con optimismo. "Estamos bastante animados en que pueda ser ese punto de inflexión para consolidar a Andalucía como uno de los destinos más importantes de Europa de turismo residencial profesional, siempre que sea en la línea de la profesionalización y la calidad, que es lo que se está planteando", comenta a elEcomista Andalucía Carlos Pérez-Lanzac, presidente de la Asociación de Profesionales de viviendas y apartamentos turísticos de Andalucía (AVVA PRO).
Tras la pandemia se ha incrementado el interés de los turistas por este tipo de alojamientos. Según la asociación, Andalucía absorbe el 45% de la demanda nacional de esta tipología de turismo. "Casi la mitad de los españoles que apuestan por la vivienda turística se quedan en la región", destaca.
Otro dato a tener en cuenta para analizar la magnitud del sector es que el 40% de los viajeros apuestan ya por el turismo residencial, una demanda que se prevé que crezca un 13% más hasta 2030. Unos turistas con una estancia mayor, tres noches de media, y también más gasto en el destino, donde dejan el 60% del presupuesto del viaje.
"Si Andalucía no tuviera esta oferta perderíamos toda esa demanda. Es un sector muy valioso, los turistas gastan mucho en el destino, en comercio local, coches de alquiler…", comenta el presidente de AVVA.
Liderazgo de Málaga
Por provincias, según los datos de la asociación, Málaga acapara la mayor parte de los alojamientos residenciales de Andalucía con un total de 69.856 apartamentos y viviendas con fines turísticos registrados. En segundo lugar se sitúa Cádiz con una oferta total de 16.536 y el tercer puesto es para Almería con 12.083.
La oferta de Sevilla se queda a la mitad con 11.389, por detrás se sitúan Granada con 8.623, Huelva con 3.901, Córdoba con 2.591 y Jaén, la provincia con menos viviendas turísticas, con un total de 1.271 alojamientos.
En Málaga además gran parte de la oferta se concentra en el centro de la capital, lo que está generando quejas entre distintos colectivos vecinales y algunos partidos políticos, que hablan de gentrificación y relacionan el incremento de precios del alquiler convencional con el auge de la vivienda turística.
"El centro de Málaga no sería lo que es si no fuera gracias a las viviendas turísticas, el sector ha posicionado a Málaga como la primera ciudad de España en las certificaciones de calidad del SICTED. Hace unos años esa zona era un lugar inhóspito e inseguro y ha cambiado completamente por la inversión privada en este sector, eso está pasando también en otras ciudades", defiende Pérez-Lanzac.
Convivencia vecinal
Estas discrepancias entre empresarios, vecinos y demás colectivos involucrados son las que han llevado al Gobierno Andaluz a tomar parte en el asunto para tratar de regularizar un sector que abarca ya el 60% de los alojamientos reglados en la región.
En este sentido, el decreto que está elaborando la consejería considera prioritarias la calidad del servicio y la convivencia vecinal, para lo que se hará partícipes a las comunidades de propietarios y se otorgarán competencias a los ayuntamientos para que puedan establecer limitaciones si fueran necesarias.
Es decir, los ayuntamientos también tendrán capacidad para poner límites a la oferta de alojamientos en sus municipios. "El objetivo es dar respuesta a las necesidades de acceso a la vivienda y la protección de los derechos de las personas residentes ante posible situación de saturación de sus espacios vecinales", explican desde la consejería.
En definitiva, el nuevo decreto lo que hará es habilitar a los municipios en una competencia que hasta ahora era exclusivamente autonómica: la ordenación turística.
Este documento también incluye la figura de la empresa gestora de viviendas turísticas con el principal objetivo de profesionalizar la explotación de los alojamientos y facilitar las relaciones con la Administración turística.
La profesionalización es precisamente uno de los grandes retos de la asociación que representa al sector, que también trabaja para consolidad la calidad de la oferta y evitar la politización del sector.
"Lo que pretendemos es que no se nos use como moneda de cambio, es una amenaza grave que pone en peligro economía, empleo, competitividad como destino e importantes inversiones", advierte el presidente.