
El tráfico de mercancías en los puertos de España volvió a números prepandemia en 2022, gracias al particular acelerón de puertos como Cartagena, que batió su propio récord y le colocó en el top 5 de puertos españoles con 36 millones de toneladas transportadas. Supera ya a Bilbao y Tarragona y se queda por detrás de los tres grandes puertos cuyas posiciones son inamovibles: Barcelona, Valencia y Algeciras.
De acuerdo a un informe elaborado por OIM, la división de consultoría de Ocean Capital Partners, se espera que para este 2023 y los próximos años la tendencia "se mantenga estable" si se cumplen las previsiones de crecimiento económico, dada la correlación de la actividad portuaria con el PIB.
Gran parte del impulso de Cartagena se debe al crecimiento del tráfico de los de graneles sólidos por la guerra de Ucrania. Esta división ha experimentado tendencias bien diferenciadas en los distintos puertos españoles por la disparidad de productos movidos en unos y en otros, de tal forma que algunos han sufrido directamente el impacto del conflicto bélico por el déficit de tráficos con origen o destino en los países en conflicto. Entre los beneficiados se sitúa Cartagena, con un crecimiento a doble dígito del 24% gracias al transporte de cereales y harinas.
El crecimiento de los graneles sólidos está alineado con los objetivos de su último informe de gestión, en el que los gestores afirmaban que el puerto necesitaba crecer, desarrollar todo su potencial y dar respuesta a la demanda de mercancías, "con más hectáreas para el movimiento de graneles sólidos".
La otra gran palanca de impulso ha sido el tráfico de graneles líquidos, que crecieron de manera generalizada en 2022 con 182,6 millones de toneladas, con alzas de doble dígito en productos como el gas natural, la gasolina o el petróleo crudo. "La crisis energética, unida a la competitiva infraestructura española para la carga, descarga y regasificación del GNL, se encuentran detrás de esta tendencia", explican al respecto desde OIM para justificar los datos. Otro factor a tener en cuenta a este respecto son las tensiones energéticas, que también han favorecido los tráficos de petróleo crudo y la gasolina.
Por el lado contrario, el vuelco en la clasificación global deja en peor posición al puerto de Bilbao, cuyo crecimiento fue del 5% pero no alcanzó cifras prepandemia, y seguidamente al de Tarragona, que retrocedió y perdió 1,5 millones de toneladas entre 2021 y 2022. El puerto vasco seguirá impulsándose en la actividad de empresas como Petronor y la regasificadora de Bahía de Bizkaia, a la vez que busca nuevas rutas en la costa este de Estados Unidos, según trasladó el presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao, Ricardo Barkala.
Valencia pierde fuelle
En la parte alta de la tabla, el tercer gran puerto de España, Barcelona, gana posiciones y se acerca muy de cerca a Valencia, que se registra la mayor caída en volúmenes generales en toda la red tras perder seis millones de toneladas transportadas respecto a 2021.
Con todo, tanto Barcelona como Valencia, junto a Algeciras, siguen inamovibles en el podio, a la vista de la distancia a la que se colocan de Cartagena.