Como si de un dejavú se tratase el año ha empezado con restricciones a los viajeros procedentes de China ante el aumento de casos de Covid-19 en el país. Desde finales de diciembre, España pide una prueba diagnóstica negativa o el certificado de vacunación a los viajeros procedentes del país asiático. Unas limitaciones que han coincidido con la apertura de las fronteras del país asiático después de tres años marcados por una política Covid cero muy estricta.
La medida se produce en un año que se presenta vital para la recuperación del turismo. Si todo va según lo previsto, será en 2023 cuando se dé por finalizada la crisis provocada por la pandemia. Así lo creen al menos los principales players del sector tras un 2022 muy bueno. "Un ejercicio muy satisfactorio que alumbró esperanzas de alcanzar la recuperación total para el año 2024 o incluso, 2023", aseguró Gabriel Escarrer, vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de Meliá Hotels International, en un comunicado lanzado a través de sus redes sociales con motivo del comienzo de año.
A pesar de que China es el mayor emisor de turistas del mundo, no supone un mercado crucial para España. En 2019, último año antes de la pandemia, llegaron al país cerca de 700.750 viajeros procedentes del país asiático según datos de Frontur, la estadística de movimientos turísticos en frontera del Instituto Nacional de Estadística (INE). Apenas supusieron un 1% del total de turistas que recibió España durante ese año.

Aunque se trata de un turismo que representa una pequeña parte, es muy atractivo para España por varios motivos. Fabián González, fundador de Forward_MAD, destaca que el 56% viaja de forma independiente, lo que supone un mayor gasto en destino. "Además, sus principales motivaciones son el arte y cultura, compras, gastronomía y turismo urbano, donde España tiene un producto diferencial reconocido mundialmente, y que encaja perfectamente con el cambio de modelo que España necesita para compensar su excesiva dependencia del modelo Sol y Playa Turoperado", añade.
También hay que tener en cuenta que se trata de turistas que apuestan por estancias de media más largas y con mayor gasto. Según datos del INE, en 2019 tuvieron un gasto medio por día de 308 euros. Si esta cifra se multiplica por los 7,82 días de media que pasan en España y por los 700.748 turistas dejaron en España 1.687 millones, una cifra que ahora vuelve a estar en jaque por las nuevas restricciones.
La importancia de China para España queda patente si los datos se comparan con los del resto de turistas internacionales. En 2019 los turistas chinos tuvieron un gasto medio diario de 308 euros mientras que la cifra desciende hasta 155 euros si se analizan a nivel general. Solo los procedentes de Estados Unidos se acercan a esta barrera aunque se quedan lejos, con un gasto diario de 258 euros.
Gana peso en España
A pesar de que no es un mercado muy relevante para el país, ha ganado mucho peso en los últimos año, hasta tal punto que los turistas procedentes de China han aumentado un 87% en apenas cuatro años, en 2016 llegaron cerca de 374.755 turistas.
A las restricciones impuestas por el Gobierno de Pedro Sánchez hay que sumarle que el turista chino es muy precavido y el país afronta una crisis económica importante. Fabián González, fundador de Forward_MAD, cree que no será hasta el segundo trimestre cuando España empiece a ver una reactivación de las reservas y los vuelos procedentes de China. "No se espera ningún efecto champán, pues la economía se ha resentido mucho estos dos años de pandemia, y en consecuencia también sus ahorros. De ahí que las previsiones apunten a que tardarán unos meses en recobrar la confianza y ahorros suficiente para salir al extranjero", explica el experto a elEconomista.es.
En una línea similar se ha pronunciado el consejero delegado de Meliá. "La previsión es de que hacia el segundo semestre de 2023 pueda reactivarse también el mercado emisor chino, a medida que la población se vaya inmunizando y recuperando de la enfermedad, tras el levantamiento de las restricciones por el Covid", ha apuntado.