¿Cómo va la recuperación del tráfico tras la pandemia?
Vamos mejorando, no alcanzamos en España la cifra de 2019, pero todavía hay mucha variación según el tipo de producto. La recuperación está más perjudicada en la larga distancia por la fuerte competencia del ferrocarril y la entrada de nuevos operadores en el mercado. En tráficos autonómicos y estatales de media distancia estamos sufriendo la política de gratuidad de Renfe.
¿Cómo afecta la gratuidad en los abonos de tren?
Me parece que es un acierto favorecer el transporte público, pero creo que debería hacerse de igual forma para todos los modos. La política de gratuidad es una medida que afecta al 11% de los municipios en España, los de más población, pero apenas cubre poco más del 50% de la población. Hay otro 50% que casualmente es la España vaciada que no tiene acceso y la única forma que tendría de llegar es en autobús. Hay otra cuestión que es la subvención al gasóleo. Es una medida absolutamente razonable y necesaria en este momento, pero también tendría que afectar al gas, entre otros. Se está dando de forma indiscriminada a transporte público y privado y debería haber una diferenciación entre ellos. No demonizamos al coche, pero creo que está muy por delante subvencionar el transporte público. No se trata de poner más dinero, se trata de redistribuirlo mejor. Creo que es importante que exista una visión integral de las políticas de movilidad, y que se extiendan de manera coordinada a todas las comunidades autónomas.
Alsa también lanzó sus propios bonos...
Sí, lo hicimos a modo de respuesta a lo que tenía el ferrocarril. La diferencia es que a nosotros no se nos complementaba al 100%. Sea como fuere, ha sido una medida muy positiva, ya que el número de clientes que se han vuelto fieles con el uso de estos bonos ha pasado del 1% al 20%. Si no hubiéramos hecho esto, la caída de viajeros hubiera estado por encima del 40% en vez de en el 25% actual.
¿Esta rebaja tiene algún tipo de aportación pública?
En las concesiones estatales hay una aportación del 50%. En las que son de comunidades autónomas también se aplica un porcentaje que es diferente en cada una de ellas. En algunos casos son del 30%, en otros se ha aumentado hasta el 50% o incluso al 100% en el caso de las islas.
A nivel financiero, ¿cómo terminarán este año?
Este año creemos que vamos a cerrar por encima del 2019 en términos de ingresos. En enero y febrero la recuperación no era la de ahora, pero desde el verano estamos teniendo valores por encima de los de prepandemia. Además, hemos incorporado nuevos negocios que ayudan en el crecimiento de la empresa.
Crecerán por tanto en ingresos y, ¿también en beneficios?
En ingresos sí crecemos por la incorporación de nuevos negocios, tanto en nacional como internacional, así como otros de diversificación. En beneficios aún no llegamos a cifras pre-Covid si se comparan los mismos negocios.
"Este año creemos que vamos a cerrar por encima de 2019 en términos de ingresos"
Alsa compró Vitalia hace unos meses. ¿Cómo les está yendo esa entrada en el negocio?
Vitalia lo compramos en el peor momento, se cerró justo con el auge del precio del gasoil. Pero estoy muy contento con la operación. El modelo de negocio con Vitalia puede suponer más de un millón de euros al año y además hemos hecho crecer el negocio, buscando sinergias con el transporte en procesos, planificación, mantenimiento, compras, clientes, etc.
¿Qué objetivos tienen con el ferrocarril?
En el tren seguimos teniendo como objetivo posicionarnos como un operador de referencia. Operamos en una actividad que se ve menos de cara al público, pero de cara a los proyectos que hay en el futuro, como las OSP (Obligaciones de Servicio Público de cercanías y regionales) o los nuevos corredores de larga distancia que están mejorando las condiciones de operación, mantenemos nuestra apuesta clara de entrada en el mercado. A mayores, analizamos y seguimos con mucho interés los proyectos de algunas Comunidades Autónomas que están planteando operar servicios OSP autonómicos de manera adicional a Renfe. Es un modo de transporte muy válido para determinadas condiciones. No hay que demonizar al autobús por el tren, pero tampoco al tren, ni al avión. Son complementarios.
Volviendo al autobús, las concesiones estatales tienen que esperar. Está sin aprobar la Ley de Movilidad y el nuevo mapa concesional...
Hay un problema estructural como país. No hemos sido capaces de sacar un modelo de contrato que sea sostenible. La Ley de Movilidad Sostenible y los mapas concesionales están absolutamente ligados. La situación actual que tiene España en materia de contratos es insostenible, no podemos seguir teniendo contratos caducados. Es una situación que hay que resolver.